La Prueba de Acceso a la Universidad (PAU, conocida popularmente como selectividad) se ha iniciado este martes con normalidad en la UIB, donde, en el conjunto de las Islas, hay 4.860 alumnos matriculados. Los exámenes se desarrollarán hasta este jueves.
El hecho de que el primer examen fuera de Lengua Castellana y Literatura, una materia obligatoria para todos ellos, ha provocado que se registraran algunos problemas en los accesos al campus de Palma a primera hora de la mañana, pero, al final, todos los estudiantes han llegado a tiempo a esa primera prueba a las 09.00 horas. Sólo en el campus de Palma, más de 2.000 alumnos estaban convocados para las pruebas.
La vicerrectora d’Estudiants, Carmen Touza, ha explicado que «no ha habido ninguna incidencia de importancia. Aunque el primer examen era de una materia común y ha habido algún problema de acceso al campus a primera hora, todos los alumnos han llegado a tiempo. A ello ha contribuido el aumento de frecuencias del transporte público en bus y metro, además del funcionamiento del servicio de BiciPalma».
Cabe recordar que la PAU de este año incorpora más preguntas competenciales en los contenidos y se aplican unos criterios más rigurosos en léxico y ortografía. En este sentido, Joan Antoni Mesquida, codirector del Secretariat Tècnic d’Accés a la Universitat, ha manifestado que «en todos los exámenes hay un mínimo de un 25 % de competencialidad, pero en la UIB ya la aplicamos desde hace años, sobre todo en materias lingüísticas. Por ejemplo, en la prueba de Lengua Castellana y Literatura, la primera del día, el 50 % es competencial».
En esta primera prueba, los primeros bloques se refieren a un artículo de la periodista Rosa Montero en el diario El País titulado Si no quieres que se te desmayen las neuronas, lee todos los días, maldita sea, aparecido en junio de 2024. Entre otras cuestiones, a los alumnos se les ha pedido un resumen, una interpretación del lenguaje y que señalen y comenten la tipología y las modalidades.
En los años 70, no te permitían hacer ni una falta de ortografía en ningún examen de bachiller, sea cual fuere la asignatura. No tuvimos traumas etc por tener una educación más exigente. Al contrario, doy gracias.