Julio ya es un mes negro en las carreteras de Baleares. Los datos son demoledores: 8 fallecidos en dos semanas. 7 muertos en Mallorca y uno más, un motorista, en Formentera. Una racha trágica que podría aumentar los próximos días. Más turismo, más conductores al volante, más coches de alquiler y muchas noches locas pueden ser los ingredientes de estas dos semanas para olvidar. La gente no deja de preguntarse qué está sucediendo para que se haya producido esta dramática cifra. Muchos interrogantes, pocas certezas. Difícil saberlo.
La jornada más negra se produjo el 4 de julio a primera hora de la mañana. Un camionero de 61 años falleció tras ser atropellado en la Vía de Cintura, a la altura de la salida del cementerio en dirección al aeropuerto. La víctima, natural de Deià y que trabajaba en Santa Maria, se había bajado de su vehículo para comprobar una posible avería en su vehículo con las luces de emergencia activadas, cuando fue arrollada por un coche que se dio la fuga. Rápidamente se inició una investigación para localizar al conductor fugado con la colaboración ciudadana y las cámaras de tráfico.
La conductora se entregó un día después declarando que «no me paré porque pensaba que le había dado al camión, no a una persona». La mujer, que dio negativo en el test de alcoholemia y al parecer se dirigía a su trabajo, explicó a los investigadores que había notado un golpe en el coche, pero que había pensado que había golpeado con el camión y pensó que los daños «los arreglaría el seguro».
El mismo día 4 se produjo otro accidente mortal en las carreteras de Mallorca. Eran las 23.50 horas cuando un hombre de 64 años, y nacionalidad italiana, falleció en otro grave accidente de tráfico en la vía que lleva de Pollença a Crestatx. El varón, que perdió la vida prácticamente en el acto, conducía su Volkswagen Beetle con matrícula alemana cuando salió de la vía e impactó violentamente contra un pino. La principal hipótesis fue que el conductor sufrió una distracción.
Siguiendo con la racha de sucesos. Una mujer de 52 años falleció el jueves 6 de madrugada, sobre las 03:40 horas, tras ser atropellada por un taxi en la calle Manacor. La víctima quedó atrapada bajo el vehículo y cuando los bomberos consiguieron liberarla los equipos sanitarios ya no pudieron hacer nada por salvarle la vida. El coche lo conducía otra mujer que dio negativo en el control de alcoholemia. Los testimonios de lo testigos apuntaban a que la mujer finalmente fallecida estaba tumbada en medio de la calle cuando pasó el taxi.
Otro atropelló mortal se produjo el miércoles 12 de julio. Una mujer, que falleció dos días después del suceso, fue atropellada en el Paseo Marítimo por un conductor borracho de 25 años sobre las cinco y media de la madrugada, en un paso de peatones situado a la altura de las Avenidas. El conductor del vehículo dio positivo en el test de alcoholemia, superando los 0,60 miligramos de alcohol por litro de aire espirado. Además, no detuvo su vehículo hasta pasado más de un centenar de metros donde impactó con un muro lateral de la vía.
El único accidente mortal de este verano en Formentera se produjo el pasado domingo 16. Un motorista falleció tras sufrir el accidente a la entrada de Sa Sequí al chocar contra una furgoneta cuando se dirigía a La Savina. Da la casualidad que el fallecido era el director de la asesoría jurídica de CaixaBank, Ignacio Redondo, de 47 años y director de la asesoría jurídica de la entidad desde 2010.
De nuevo el Paseo Marítimo de Palma fue escenario de un nuevo accidente mortal con un peatón como víctima. La madrugada del 16 una mujer de 36 años de edad murió atropellada frente al Palacio de Congresos de Palma. A la llegada de la ambulancia, la mujer se encontraba en parada cardio respiratoria con lesiones severas y no pudo ser reanimada. El conductor del vehículo, que se dio a la fuga, se entregó a la Guardia Civil un día después. El hombre, un español de unos 30 años, afirmó que se había enterado por el diario Ultima Hora de que había matado a una persona. La Guardia Civil ha detenido al conductor y a la persona que le acompañaba en el momento del suceso por un delito de encubrimiento. La jueza ha decretado este martes para ambos libertad provisional sin fianza. Como medidas cautelares al conductor se le ha retirado el carnet de conducir, no podrá abandonar la Isla y deberá acudir al juzgado cuando sea requerido.
El lunes 17 las carreteras de Mallorca se cobraron una nueva víctima mortal. En esta ocasión el fallecido es un motorista de 44 años. El trágico suceso tuvo lugar este lunes a las 10.30, a la altura del kilómetro 39.300 de la Ma-13, es decir, la carretera que une Palma-Alcúdia, justo a la entrada del municipio turístico, al colisionar frontalmente contra un todoterreno que, según las primeras hipótesis de la investigación y a falta de confirmación oficial se había saltado previamente un ceda al paso. Agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, Policía Local de Alcúdia y personal sanitario del Servei d'Atenció Mèdica Urgent (SAMU-061) acudieron al escenario, pero no pudieron hacer nada por la vida del motorista dada la gravedad extrema de las lesiones. El conductor del todoterreno implicado en el accidente fue detenido por un presunto delito de homicidio imprudente y, tras prestar declaración, fue puesto en libertad. El magistrado acordó privar cautelarmente al investigado del derecho de conducir vehículos a motor y ciclomotores, en tanto se sustancia el procedimiento.
La octava víctima mortal se ha producido este martes 18 de madrugada. De nuevo un motorista. El accidente de tráfico se produjo en la autovía MA-19, pasada la rotonda de Ciudad Jardín. Los hechos ocurrieron antes de las cuatro de la mañana y, en un primer momento, se ha descartado la implicación de otro vehículo en el suceso. Los servicios policiales se han hecho cargo de la investigación para esclarecer las causas del accidente que le ha costado la vida al motorista.