‘Tomeu', un ejemplar de helics aspersa müller, de sa Caragolera de Binissalem, será clave en la investigación de la genética de caracoles zurdos, aquellos que forman su concha en el sentido inverso a las agujas del reloj. Hace una semana saltaba a la opinión pública la campaña Jeremy busca pareja, lanzada a nivel mundial por el doctor Angus Davison, experto en genética evolutiva de la Universidad de Nottingham. Davison buscaba por todo el mundo un caracol zurdo para emparejarlo con el caracol ‘Jeremy', un ejemplar que previamente le había entregado un científico jubilado del Reino Unido.
Se trata de una rareza de la naturaleza, se calcula que uno de cada millón de caracoles es zurdo. Emparentar a ‘Jeremy' con otro ejemplar de su especie puede ser determinante para establecer la predisposición genética a ser zurdo y para entender cómo funciona el gen que controla la simetría del cuerpo en diferentes especies.
Los caracoles son hermafroditas incompletos, lo que quiere decir que nacen con órganos masculinos y femeninos a la vez pero no pueden autofecundarse. El joven Miquel Àngel Salom encontró hace dos días un ejemplar zurdo de la misma especie que ‘Jeremy' en su Caragolera de Binissalem. Inmediatamente contactó con el doctor Angus Davison y ya ultiman los detalles del envío de ‘Tomeu' (así lo ha bautizado Salom) a Inglaterra. «No lo buscaba, habría sido imposible, pero estaba limpiando caracoles cuando noté que su concha no era normal, me fijé y efectivamente, vi que era zurdo», explica Salom.