Jeremy no es un caracol como los demás. Es zurdo, es decir su concha se enrolla hacia la izquierda y no hacia la derecha, que es lo habitual. Este hecho le condiciona su vida, hasta el punto que podría morir virgen. El motivo: sólo puede aparearse con otro caracol zurdo y no son muy habituales.
Los caracoles se aparean frente a frente y, Jeremy, al ser zurdo no consigue que sus poros genitales coincidan con el de su pareja resultando imposible la penetración. A pesar de ser hemafroditas, en raras ocasiones se reproducen sin pareja.
Este caracol fue encontrado por un científico jubilado en un parque de Londres y lo envió a la universidad de Nottingham. El profesor de genética evolutiva Angus Davison lo está estudiando. Y ha sido él mismo el que ha hecho un llamamiento mundial para encontrarle su media naranja bajo la campaña: «¡Ayudar a Jeremy a encontrar una pareja!».
La posibilidad de que un caracol sea zurdo es de 1 entre 100.000. Davison en declaraciones a la BBC ha asegurado: «En 20 años trabajando con caracoles, nunca había visto nada igual».
Encontrarle una pareja será decisivo para poder estudiar la genética de los caracoles zurdos. No es tarea fácil. Para saber si un caracol es zurdo basta con mirar hacia donde se enrolla su concha.
Si alguien encuentra esta pareja, puede ponerse en contacto con la universidad de Nottingham.