Algo de nervios y muchos ilusión. Los centros educativos de Baleares han retomado este viernes la actividad con la vuelta a las aulas de 173.482 alumnos en el tercer curso COVID. Aunque el riesgo continúa, este curso las cosas ya serán muy diferentes, la vacunación a mayores de 12 años y la experiencia del curso anterior hacen que los padres y madres confíen en que los colegios son lugares seguros.
Puntuales a las nueve de la mañana, la mayoría de centros educativos han abierto este viernes sus puertas sin ningún tipo de incidencias más allá de la lluvia. Lo han hecho entre el caos habitual del primer día y la ilusión de los alumnos y alumnas de volverse a encontrar después de meses de vacaciones. Había nervios por conocer como serán los próximos meses y también muchas risas de esas que provocan los reencuentros. Entre los más pequeños algún que otro llanto. Pero lo más importante, se respiraba tranquilidad y cierta normalidad tanto por parte de los docentes como de los padres y madres.
Como se recordará, se mantienen casi todas las medidas preventivas frente a la pandemia del coronavirus. Por tanto las entradas han sido de manera escalonada y con mascarillas por doquier. En Baleares, los centros de más de 600 alumnos tienen cinco días para empezar el curso de manera escalonada, mientras que los de menos de 600 alumnos tienen tres días para hacerlo.
Otra diferencia importante es que se recuperan las ratios de los cursos prepandemia, por tanto ya no habrá grupos reducidos para tener menos alumnos por aula. Además, los protocolos se relajan un poco y se acercan a la normalidad, la distancia social pasa a ser 1,5 metros a 1,2. En cuento a vacunación, Baleares es una de las comunidades que cuenta con la cifra más alta de profesores y alumnos mayores de doce años a los que se les ha inyectado el fármaco contra el coronavirus. Todos los centros públicos y concertados tendrán filtros móviles para mejorar la calidad del aire, con una media de dos por cada tres aulas.
Este curso también regresan las extraescolares, al inicio del anterior estaban prohibidas para mezclar alumnos de diferentes grupos. Ahora, los padres ya pueden contar con este completo a la formación académica que en muchos de los casos soluciona algún que otro quebradero de cabeza en la conciliación laboral y familiar.
Por tanto, todo hace pensar que este curso será lo más parecido a la normalidad que conocíamos de antes. Habrá que esperar unos meses para ver si, efectivamente, la pandemia se aleja de las aulas.