La dirección nacional del PP se ha puesto en contacto estos días con cargos del partido en Baleares para solicitar información sobre la polémica surgida con las ayudas al catalán y para pedirles que ‘enfríen' el debate en la medida de sus posibilidades.
En el PP balear tratan de quitar hierro al asunto, si bien reconocen que este debate les perjudica porque en las filas de los ‘populares' de las Islas hay distintas sensibilidades sobre este asunto. El presidente del PP balear, Gabriel Company, ha repetido en los últimos días que defienden la convivencia de las dos lenguas oficiales y en la calle Palau Reial insisten en que su modelo de partido está más cerca del PP gallego que del PP catalán.
En cualquier caso, la decisión de la delegada del Gobierno, Maria Salom, de impugnar las ayudas a la rotulación en catalán en diversos ayuntamientos ha dejado al partido en una difícil situación y algunos dirigente del PP consideran incomprensible esta actuación unilateral.
La presidenta del Govern, Francina Armengol, entró en el debate y acusó a Salom de buscar «polémicas» donde no las hay. «Me parece lamentable que en esta guerra entre Ciudadanos y PP desenfrenada, se busque utilizar las Administración del Estado para ir en contra de normativas que se han hecho siempre en estas islas y que parten del consenso también con el PP», señaló. Recordó que la Ley de Normalización Lingüística se aprobó con un Govern del PP: