La repentina muerte de Xisco Serra, uno de los culturistas mallorquines más reconocidos de todo el panorama internacional, ha provocado este jueves una gran conmoción en Mallorca. Su fallecimiento, según han señalado sus allegados, se ha producido por causas naturales tras sufrir una indisposición estomacal. Su triste pérdida, sentida por todos aquellos que le conocían, ha quedado reflejada también en las redes sociales, donde numerosos usuarios han querido despedirse de él.
La noticia, adelantada por Ultima Hora, ha sido muy compartida por Facebook, canal para muchos para dejar sus comentarios y sentidas palabras: «No me lo puedo creer», «gran deportista, DEP», «una verdadera lástima, gran deportista y mejor persona, DEP» y «lamentable, me ha consternado...Mucha fuerza y animo a la familia», han sido algunas de las muestras de afecto con las que los usuarios han dado su último adiós a Serra.
Por otro lado, algunos han querido recordar y poner en valor la figura deportiva que representaba Serra dentro del mundo deportivo balear y del culturismo, siendo uno de los más queridos por la sociedad mallorquina. «Descanse en Paz, una persona centrada y siempre dedicada a la superación con inteligencia. Echaremos de menos su ejemplo», «descansa en paz, tus palabras ayudaron a muchas personas, ánimo a la familia», «Una gran pérdida para todos, gran deportista y mejor persona. Seguro que seguirá entrenando ahí donde esté. Abrazos a la familia», son varios de los comentarios recordando la influencia que tenía Xisco Serra en el ámbito deportivo.
Licenciado en Ciencias de la Educación Física, dedicó toda su vida al mundo del fitness y del culturismo. En la actualidad estaba al frente de su propio gimnasio 'XS' en Son Servera y asesoraba a centenares de atletas de forma 'on line'. De hecho, fue uno de los pioneros en utilizar las nuevas tecnologías convirtiéndose en todo un influencer del sector. En su palmarés deportivo constan varios campeonatos de Mr. WORLD, Mr. Olimpia y varios territoriales, nacionales e internacionales.
Humilde, trabajador y muy educado, siempre se presentaba como un amante del deporte. Comenzó a entrenar a los 16 años, un 3 de marzo de 1990, en el Gimnasio Mundo regentado por Jordi Badia y Youzina Van Pell. En aquellos días aquel adolescente de complexión más bien delgada y aspecto enfermizo quiso mejorar su aspecto físico general, hasta el punto de enamorarse del deporte de las pesas.