El lunes estaba sentado tranquilamente en un banco de Passeig Mallorca, a unos pocos metros de la Jefatura Superior de Policía. Allí lo vieron los agentes y lo arrestaron de inmediato. Se lo había puesto bien fácil a los investigadores. Y es que el pasado día 15, el ahora detenido, atracó con un cúter una farmacia de la calle Aragón de Palma. Tras amenazar a una empleada, huyó con un botín de 140 euros. Eso sí, fue educado. «No quiero hacerle daño. Lo siento», le dijo el delincuente a la mujer antes de marcharse de allí.
Este martes por la mañana, el hombre, español de 37 años, pasó a disposición judicial y el magistrado dictó su puesta en libertad, a pesar de que el representante de la Fiscalía había solicitado el ingreso en prisión para el sospechoso, que fue asistido por el abogado David Colom.
Noche
Los hechos, tal y como informó la Policía Nacional, tuvieron lugar el miércoles 15 sobre las 21.00 horas. El varón entró a una farmacia de la calle Aragón provisto, según la empleada del local, de un cúter. Con él le exigió a la mujer de manera reiterada que le diera todo lo que había en la caja.
La perjudicada, aterrorizada, le dio el dinero y el ladrón huyó con el botín, que ascendió a unos 140 euros. La escena, como suele ocurrir en estos casos, quedó grabada por una cámara de seguridad del establecimiento. La propiedad de la botica avisó a la Policía de lo ocurrido y abrió una investigación. En las imágenes se le veía bien la cara, por lo que dar con él iba a ser cuestión de tiempo. Pero no sabían que iba a ser tan fácil.
Una patrulla se topó con el sospechoso este lunes en Passeig Mallorca y lo reconocieron de inmediato. Estaba sentado tan tranquilo en un banco y fue detenido como presunto autor del robo con intimidación. El juez de guardia decretó este martes su puesta en libertad.