La Policía Nacional ha detenido en Palma a un hombre, de nacionalidad española y 30 años de edad, acusado de estafar unos 2.000 euros a varias personas a finales de 2022 con el falso alquiler de una habitación en la calle Industria de la capital balear. El arrestado, para captar a sus víctimas, ofertaba el arrendamiento a un precio muy asequible a través de Internet, incluyendo Facebook, lo que llamó la atención rápidamente de decenas de personas. El sospechoso utilizaba una foto que no era suya en los distintos perfiles con nombres falsos que utilizaba.
Según fuentes judiciales, el varón, que quedó en libertad con cargos, tenía un modus operandi muy definido. Cuando los denunciantes le mostraban interés por alquilar la habitación y acordaban la cuantía, que oscilaba entre los 380 y 400 euros, el arrestado les enviaba más fotografías de la estancia y les solicitaba un pago que podía alcanzar los 1.000 euros en concepto de mes y depósito. Esta transacción se hacía a través de Bizum o en efectivo. Llegada la hora de la entrega de llaves, el ahora detenido, que se comunicaba con ellos por WhatsApp, se inventaba que era el sobrino del que había publicitado la oferta, ya que su aspecto físico no coincidía con la imagen que tenían de él. Con las llaves en la mano y en la misma puerta del portal, el apresado les decía que se tenía que marchar y no podía acompañarles arriba. Los perjudicados subían al piso donde debía estar la habitación por la que habían pagado y al llegar a la puerta de la vivienda se percataban de que no podían abrirla. Cuando le llamaban para pedirle explicaciones el teléfono no daba señal. La Policía Nacional recibió tres denuncias en apenas una semana de víctimas del estafador.
En una de las ocasiones, el morador del inmueble, ubicado de la cuarta planta, se encontraba en el interior y se sorprendió de lo que ocurría. Al abrir la puerta se topó con una de las víctimas y le explicó que no era la primera vez que esto pasaba y que sospechaba de que tras el engaño se encontraba su excompañero de piso. Le enseñó la foto de quien creía que andaba detrás de la estafa y no se equivocó. Rápidamente fue reconocido por el perjudicado. Con dicha información acudió a la Jefatura a poner en conocimiento de la Policía lo ocurrido, que inició una investigación que culminó con el arresto del hombre.