Un cuerno de rinoceronte negro valorado en 222.480 euros fue robado en una finca de Bunyola en 2018. Los ladrones colocaron en su lugar una réplica de resina. La Guardia Civil abrió una investigación y detuvo a los tres sospechosos dos días después y recuperó la valiosa asta. La Fiscalía reclama ahora penas que suman siete años y mes de cárcel para los acusados. El Ministerio Público pide sendas condenas de dos años y nueve meses para dos de ellos por un delito de hurto y otro de tráfico de especies protegidas. Para el tercer procesado, a quien aprecia la atenuante de reparación del daño, solicita un año y siete meses de prisión.
Los hechos ocurrieron entre las 11.30 y las 13.30 horas del 14 de noviembre de 2018. Los tres hombres, dos españoles y un italiano, acudieron a la casa tras hacerse pasar por compradores de fincas rústicas de grandes dimensiones. Una vez allí, sustituyeron el cuerno de rinoceronte, datado en 1975, por una réplica casi exacta que pegaron con pegamento. Los delincuentes aprovecharon que la sala de trofeos de la vivienda se encontraba abierta para acceder al interior y realizar el cambio. Los propietarios de la pieza denunciaron ante la Guardia Civil su desaparición en cuanto se percataron del robo.
El 16 de noviembre, dos días después de la sustracción, el cuerno fue recuperado por los agentes, que detuvieron a los tres hombres. Uno de los arrestados confesó el lugar donde lo habían escondido, un paraje cercano a Sóller. El coste de la restauración de la pieza ascendió a 4.840 euros, que la dueña reclama. El cuerno de rinoceronte negro, según sostiene el Ministerio Fiscal en su escrito de acusación, es un espécimen protegido que los investigados pretendían vender en el mercado ilícito, donde alcanzaría un valor de 222.480 euros. El juicio por el robo de la preciada asta se celebrará en un juzgado de Vía Alemania en los próximos meses.