Las causas que provocaron el accidente mortal de los tres jóvenes, de entre 22 y 25 años, en la carretera que une Can Picafort y Artà siguen investigándose. Por el momento, y falta de confirmación oficial, la principal hipótesis de los investigadores de la Guardia Civil es un exceso de velocidad del único vehículo implicado en el siniestro. Antes de la colisión contra el guardarraíl, parece que el conductor no llegó a frenar, dado que no han hallado marcas de frenado sobre el asfalto.
El trágico suceso ha consternado a los vecinos de Capdepera y Artà, donde residían los jóvenes fallecidos. El siniestro se produjo este domingo, en torno a las ocho de la mañana, cuando circulaban en el término municipal de Santa Margalida. El Seat Ibiza no llegó a tomar una curva, a la altura del kilómetro 15,700, e hizo un recto a gran velocidad. El coche impactó frontalmente contra la protección y cayó por un terraplén de un desnivel considerable para acabar colisionando contra un árbol. El coche quedó reducido a un amasijo de metales.
Los sanitarios trasladado al lugar del accidente sólo pudieron certificar la muerte de los chicos. La Guardia Civil comunicó el trágico sucesos a los familiares en el cuartel de Artà.