Golpe policial contra el tráfico de drogas en uno de los puntos más calientes, peligrosos y conflictivos de Palma en los últimos meses: el parque Wifi.
Agentes del Grupo II de Estupefacientes de la Policía Nacional en colaboración con la Policía Local de Palma han desarticulado el principal punto de venta de droga que abastecía el parque Wifi, ubicado frente a la Comandancia de la Guardia Civil, en el polígono de Levante de Palma.
En el marco de la denominada ‘operación Router', en clara alusión al nombre del parque, los agentes dan respuesta a la creciente oleada de quejas vecinales sobre el consumo de marihuana.
La investigación se inició hace varias semanas. Los agentes responsables del caso tenían constancia, a través de vigilancias y denuncias, que en la zona se había disparado el consumo y venta de sustancias estupefacientes. Tras realizar varias gestiones y aumentar las vigilancias en el lugar, los policías no tardaron en darse cuenta de que había varias personas encargadas de la venta. Lo curioso de esta situación era que éstos pequeños narcos trabajaban con cantidades de marihuana prácticamente insignificantes. Es decir, que si la Policía Nacional les identificaba y procedía a su cacheo, las dosis que llevaban encima eran mínimas y los sospechosos lo justificaban alegando que se trataba de consumo propio.
Por ese motivo, tras varias jornadas de seguimientos y control de los vendedores, los funcionarios policiales consiguieron identificar plenamente a los sujetos encargados de distribuir la marihuana con la finalidad de localizar el punto de distribución.
Los policías fueron cercando a los investigados hasta que, definitivamente, se localizó el piso al que acudían de forma habitual. Horas después se procedió al asalto del lugar deteniendo a un varón español de 35 años, identificado como Antonio F.H., y con antecedentes policiales, como presunto autor de un delito contra la salud pública.
En el interior del inmueble se localizó una infraestructura de última generación para el cultivo y el tratamiento de la marihuana. Los agentes también intervinieron varios centenares de plantas de marihuana, que arrojan un peso aproximado de 54 kilogramos. El ahora detenido, según el argot policial es la última pieza del eslabón delictivo. Una persona adicta al juego que trabaja para pagar sus deudas. Por ese motivo, ahora se trata de conocer el clan que está detrás del tráfico de droga del parque.
Presencia policial no es sufienciente y se exige que Cort tome medidas
La Policía Nacional, Policía Local de Palma y la Guardia Civil lo tienen muy claro. Si se quiere acabar con los botellones, venta de droga, peleas, prostitución de menores y los desfases en el parque Wifi de Palma, Cort tiene que tomar cartas en el asunto, proceder al vallado del recinto y cerrarlo por las noches. Las mismas fuentes sostienen que se trata de voluntad política y que la regidora de Seguretat, Joana Maria Adrover, no puede lavarse las manos y mirar para otro lado. Mientras tanto, el CNP aumenta su presencia en la zona.