Solemne despedida al legionario palmesano que el lunes murió al recibir un disparo durante unas maniobras en Alicante. El patio de armas de la base de Viator acogió este miércoles los actos fúnebres en honor a Alejandro Jiménez Cruz, de 22 años.
En la base de Almería, sede de la brigada Rey Alfonso XIII, se instaló el martes por la tarde la capilla ardiente del caballero legionario, en la iglesia de las instalaciones de Viator. Este miércoles se ofició una misa de campaña y después comenzó el acto de honras fúnebres, que estuvo presidido por el general jefe de la Fuerza Terrestre, el teniente general Juan Gómez de Salazar; el general jefe de la División Castillejos, el general de división Fernando García, y el general jefe de la Brileg (Brigada Alfonso XIII de la Legión), Marcos Llago.
En el acto castrense, en el patio de armas de Viator, participaron efectivos de la base, familiares y amigos. Los padres de Alejandro Jiménez, se desplazaron desde Palma y una ciudad de la Península para despedir al legionario, que se había incorporado a la unidad en noviembre del año pasado. El legionario de Palma recibió este miércoles a título póstumo la medalla al mérito militar.
Homenaje en Palma
Las fuentes militares consultadas este martes indicaron que el legionario palmesano será incinerado en Almería y que ahora están pendientes de la decisión de la madre para celebrar una misa en su memoria en Palma. La Policía Judicial de la Guardia Civil continúa con la investigación para aclarar el trágico accidente, que ocurrió durante unas maniobras con fuego real en Alicante.
El rebote de una bala alcanzó en la axila a Alejandro Jiménez, que llevaba un chaleco antifragmentos, y le provocó la muerte. El joven había sido jugador y entrenador de rugby en Palma y era una persona muy apreciada por todos. Su fallecimiento ha causado una gran conmoción y este martes se llevó a cabo un homenaje en Palma.