Un jurado popular de la Audiencia Provincial ha exculpado a una madre y a su hija de un delito de allanamiento de morada en Bunyola. El tribunal absolvió este jueves a las dos acusadas de instalarse en la casa de su exmarido y padre, respectivamente, en julio de 2014, 10 años después de la separación del matrimonio.
Las dos acusadas tenían llaves de la vivienda. El jurado considera que tenían libre acceso a la vivienda y que la madre era copropietaria al 50 por ciento con su marido.
Las dos acusadas explicaron en la primera sesión de juicio que acudieron al domicilio familiar sin pedir permiso al hombre porque también les pertenecía. No era de uso exclusivo de nadie. Así lo ha corroborado el tribunal popular.