El último balance eleva a 64 el número de víctimas mortales del incendio de Pedrógão Grande, en Leiria, al norte de Lisboa. Uno de los últimos fallecidos e un bombero que estaba hospitalizado tras sufrir importantes quemaduras. Además hay 135 heridos: 121 civiles, 13 bomberos y un militar.
El comandante operativo de Protección Civil, Elísio Oliveira, ha informado de la nueva cifra de fallecidos por el incendio que, según la última información disponible, está controlado en un 70 por ciento, aunque el restante «inspira preocupación». «La tarde está teniendo situaciones complejas y ha obligado a confinan y evacuar poblaciones», ha señalado Oliveira en una comparecencia pública.
«Con respecto a los cinco bomberos heridos, tengo que dar esta triste noticia: Gonzalo estaba ingresado en el Centro Hospitalario y Universitario de Coimbra y hace aproximadamente una hora ha fallecido», ha anunciado el presidente de la Liga de Bomberos Portugueses, Jaime Marta Soares.
«Los bomberos portugueses están de luto (...). Ya estaban de luto por lo que les ocurrió a tantas personas que perecieron en este brutal incendio. Ahora lloramos la muerte de uno de los nuestros», ha añadido.
El fallecido pertenecía a la dotación de Castanheira de Pera, tenía 40 años, estaba casado y tenía un hijo. Fue ingresado con heridas en la cara y quemaduras en las vías aéreas.
Mientras, el presidente portugués, Marcelo Rebelo de Sousa, ha visitado esta tarde cuatro puestos de mando de los bomberos en la zona de Pedrogão Grande pese a la temperatura superior a los 35 grados y ha manifestado su optimismo sobre las posibilidades de controlar el incendio.
El incendio, originado por un rayo según la investigación preliminar, ha causado la muerte de las personas que quedaron el sábado atrapadas por las llamas en una carretera. Entre los fallecidos hay un ciudadano francés, según ha confirmado este lunes el Ministerio de Asuntos Exteriores galo.
Hasta el momento han sido identificadas 25 de las 63 víctimas mortales. «El trabajo de identificación se está haciendo muy rápido. Hay víctimas cuya identificación es más fácil, pero otras requieren de pruebas complementarioas. Creo que es un trabajo que se va a desarrollar rápidamente y en breve estará concluido», ha explicado la ministra de Administración Interior, Constança Urbano de Sousa.