La capacidad de resistencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, es de sobras conocida, pero todo tiene un límite. La situación a la que ha llegado el líder socialista es insostenible, pocas democracias europeas admitirían lo que está sucediendo en España. De hecho, el propio Sánchez llegó a la Moncloa gracias a una moción de censura contra la corrupción del PP, que puso fin a la presidencia de Mariano Rajoy.
Por mucho que el líder del PSOE haya pedido perdón y haya exigido a su número 3, Santos Cerdán, que dimitiese de forma inmediata tras conocerse el informe de la UCO que lo implicaba en el ‘caso Koldo’, no es suficiente. La UCO cree que el secretario de Organización del PSOE gestionó pagos de 620.000 euros para José Luis Ábalos y Koldo García. Además, según el juez se desprenderían indicios de delitos de organización criminal y cohecho contra Cerdán.
Por tanto, Sánchez tendría que haber convocado elecciones anticipadas. Además, no se puede olvidar que el que fuera mano derecha de Sánchez, José Luis Ábalos y defensor de la moción contra la corrupción, también está imputado en el ‘caso Koldo’. También fue ministro de Transportes del Gobierno de Sánchez.
Tampoco podemos olvidar el ‘caso Fontanera’, en el que Leyre Díaz -que ha pedido la baja temporal del PSOE- ofrecía reuniones y acuerdos con la Abogacía y la Fiscalía del Estado, a cambio de información comprometedora contra el alto mando de la UCO. Por cierto, era una persona de confianza de Cerdán.
Sánchez no eligió buenos compañeros de viaje en el Peugeot
Por tanto, Sánchez no eligió buenos compañeros de viaje en el Peugeot con el que recorrió España para ganar las primarias al aparato del PSOE. Además, un mensaje revela que Santos Cerdán amañó las primarias que ganó Sánchez en 2014: «Mete dos papeletas». A muchos socialistas aún le siguen abochornando la urna escondida tras una mampara en aquel congreso extraordinario que Sánchez ganó.
Aunque siempre hay que respetar la presunción de inocencia, el hermano y la mujer del presidente del Gobierno están imputados, así como el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz.
El tiempo dirá la capacidad de resistencia que tiene Pedro Sánchez, pero todo tiene un límite y la democracia no es una excepción. Algún día habrá elecciones en España y que nadie se sorprenda entonces si partidos radicales y de extrema derecha obtienen resultados espectaculares. Ejemplos tenemos de sobra: la vuelta de la extrema derecha al Bundestag alemán, en Francia los ultras amenazan con hacerse con la presidencia de la República, en Argentina ya gobierna Milei...
LLorenç VicensOtro más! Focas, vuelvan al circo que no hay más nada que aplaudir .