La marca de moda Desigual hace un guiño a las mujeres reales con su última campaña, en la que una modelo luce un slip que deja ver un trasero con celulitis.
Es el contrapunto a la tendencia imperante durante demasiado tiempo en este mundo, que ha reclamado mujeres cada vez más delgadas como reclamo y paradigma de belleza, y en la que, como hemos visto recientemente, ni una talla 34 era suficiente.
La protagonista de la campaña es la modelo Charli Howard, quien junto a una compañera, fue despedida de su anterior agencia por ser «demasiado grande».
A partir de aquí inició un proyecto diametralmente diferente, inclusivo para todo tipo de mujeres, independientemente de sus curvas, y de si su talla era pequeña, mediana o grande.
«La belleza no sólo se encuentra en el tamaño cero. La diversidad es la clave para cambiar», comenta la modelo de la imagen, que ha corrido con fuerza desde hace unos días en las redes sociales, a partir de su publicación en Instagram.
«Todos tenemos inseguridades y pequeños fallos, pero eso es exactamente lo que nos hace únicos y especiales», describe la firma en otra de las imágenes sin retoque.