Empresas del sector han denunciado que, por segundo verano consecutivo, desde principios de junio ha vuelto la actividad de alquiler de motos de agua de manera ilegan en la bahía de Alcúdia. Los denunciantes explican que la carga y descarga de clientes se produce en el muelle de s'Oberta, gestionado por Ports IB, donde también se llenan los depósitos de las motos con bidones de gasolina. Precisamente, se trata de una zona protegida donde el Parc Natural de s'Albufera confluye con el mar.
No es la primera vez que se producen estas actividades y son denunciadas. El verano pasado empresa del sector náutico ya denunciaron esta actividad «que es ilegal y una competencia desleal para los que operamos conforme a normativa, con la autorización de Capitanía Marítima en el puerto deportivo del Port d'Alcúdia y con permiso en el Club Náutico de Can Picafort», señalan los denunciantes.
Sin actuaciones
El Govern no es ajeno a esta situación. Fuentes de la conselleria d'Agricultura i Medi Natural corroboran que los Agents de Medi Ambient ya han interpuesto cuatro denuncias contra la empresa de motos de agua que opera sin autorización en s'Oberta, dos el verano pasado y dos este año. «El Servei d'Espais Naturals las está tramitando, y una vez finalizada la tramitación sabremos la cuantía de la sanción que se impondrá».
También la Conselleria de la Mar i el Cicle de l'Aigua, a la que está adscrita la entidad que gestiona distintos puertos y amarres, Ports Ib, conoce la problemática. «Todavía no se han emprendido acciones pero es intención de PortsIB reunirse con Medio Natural para buscar una solución al problema». Al tratarse de una zona protegida, ambas administraciones tienen que coordinarse.
Los denunciantes señalan las situaciones de peligro en las que estas empresas ponen a sus clientes. «Las motos tienen que repostar en la gasolinera del puerto, no se pueden llenar con bidones en el agua con la gente alrededor; ni tampoco almacenar la gasolina en un solar vacío de la zona».
Vecinos de la urbanización próxima al Pont dels Anglesos y s'Oberta también denuncian el trasiego terrestre de las motos. «Circulan a toda velocidad con las motos en un remolque por la urbanización, son un riesgo para las familias y niños».