Poco antes de las 12 del mediodía, el sol ya apretaba y los turistas empezaron a llegar en masa a Es Caló des Moro. En ese momento un grupo de bañistas ha empezado a gritar «tourist go home» (turistas fuera) y la Guardia Civil ha hecho acto de presencia, tanto con agentes uniformados como de paisano, que han empezado a identificar a algunos bañistas que se encontraban en el agua, ante la estupefacción y rechazo de los asistentes.
En ese momento los bañistas han empezado a dispersarse y los agentes han solicitado la retirada de las pancartas. Según han explicado algunos de los presentes, «los guardias han hecho una barrera para que los mallorquines subieran del Caló y se permitiera bajar a los extranjeros. A los mallorquines nos pedían el DNI y a los turistas no», ha explicado indignada una de las asistentes. Los agentes han interpretado que se trata de una manifestación que no contaba con los permisos para realizarla. También han indicado que no podían gritar consignas.
Esta intervención ha hecho que el acto lúdico y festivo de pasar una mañana en la playa, que tenía previsto finalizar a las 13 horas, se ha tenido que adelantar una media hora. Así, a las 12.30 se ha dado por finalizada la acción. Mallorca Platja Tour apuntó en Twitter: «hemos recuperado es Caló des Moro. Ha sido mágico. Hacemos un llamamiento a ‘recuperar' todas y cada una de las playas de Mallorca».
La mayor parte de la acción se ha llevado en un plan festivo y lúdico sin incidentes, incluso ha habido ‘ball de bot' en la playa; exceptuando esta intervención de la Guardia Civil, que ha identificado a algunos asistentes.