Aluvión de multas de tráfico en Muro. Numerosos vecinos que veranean o visitan las casas de veraneo, los restaurantes o la popular playa de la Caseta des Capellans están recibiendo centenares de notificaciones de multas debido a un error informático que impide reconocer las matrículas de sus vehículos, pese a contar con la autorización pertinente para circular por la zona ACIRE vigilada por cámaras desde el verano pasado. Así lo ha confirmado el propio alcalde de Muro, Miquel Porquer, quien ha sido uno de los afectados al recibir hasta 4 multas distintas.
«El problema se debe a un error administrativo en el volcado de las matrículas a la base de datos que notifica las multas a la Agencia Tributaria (ATIB); algunos vecinos han recibido muchas multas, una por cada vez que entran o salen ante las cámaras del ACIRE de Capellans al no estar sus matrículas en el listado por error, pero se están revisando todas las reclamaciones una a una y las que están en este caso se resuelven a favor de los afectados», aclara Miquel Porquer (PI).
Error informático
El Ajuntament de Muro ha destinado un funcionario a revisar una a una las reclamaciones que realizan los afectados, y las resolverá favorablemente en aquellos casos que correspondan a vehículos que habían sido registrados por sus usuarios en el listado municipal y que cumplan los requisitos para tener la autorización para circular por Capellans.
La revisión de estas reclamaciones también ha revelado casos de sanciones que no se deben a este error, sino a vecinos que han cambiado de vehículo y no han registrado la nueva matrícula, o algunos que pese a tener derecho a circular por Capellans por estar empadronados en Muro, no han formalizado la pertinente autorización en las oficinas municipales y obtener el distintivo para el vehículo. El verano pasado, el Ajuntament de Muro amplió la zona ACIRE a todo el núcleo de Capellans, cuyo acceso está restringido a personas empadronadas en Muro y a sus familiares directos.
Cerrar el acceso a la Caseta des Capellans a los no residentes es una vieja reclamación de quienes disfrutan de estas casas ubicadas en un privilegiado tramo de las Playas de Muro, cuyas calles son de arena, no están pavimentadas. Cada verano, el continuo tráfico de coches entrando y saliendo del núcleo levantaba una polvareda y provocaba un caos circulatorio y de aparcamiento, muy escaso en la zona. Tras varios veranos regulando el acceso con un controvertido servicio de vigilantes privados, el año pasado se instalaron vallas y una rotonda de plástico, además de la cámara que registra a todo vehículo que entra y sale de Capellans.
Desde la oposición, el concejal de Més, Miquel Àngel Tortell, ha sido crítico con la situación. «El ACIRE es una buena oportunidad para pacificar Capellans, pero estas multas demuestran que las cosas no se han hecho bien; también deberían arreglar la entrada que han dejado, porque es penosa».