Ambiente más que caldeado en la sala de plenos del Ayuntamiento de Palma durante el debate y votación de dos propuestas que llevaban PSOE y Més per Palma referentes a la condena por el comportamiento que tuvo el presidente del Parlament, Gabriel Le Senne, durante la derogación de la Ley de Memoria Democrática, hacia las diputadas socialistas Mercedes Garrido y Pilar Costa; a las que expulsó por exhibir una fotografía de las Roges del Molinar y cuya imagen terminó rompiendo al internar retirar la misma.
El cruce de acusaciones entre los partidos de izquierda y derecha ha terminado con una bronca monumental y con el voto en contra del PP hacia dos de los puntos de ambas mociones en los que se reconocía que el Consistorio condenaba la conducta «violenta» de Le Senne y se daba apoyo a ambas diputadas del Parlament balear. El debate ha comenzado con la intervención de la portavoz de Més per Palma, Neus Truyol, y del portavoz del PSOE, Francisco Ducrós, pero no ha sido hasta la segunda intervención de Truyol cuando el tono ha subido en la sala.
«Los miembros del PP son herederos del franquismo. Si son demócratas, deben condenar el franquismo», ha dicho Truyol. En este punto el escándalo ha sido mayúsculo y desde la bancada del equipo municipal se podía escuchar a la regidora de Comerç, Lupe Ferrer, gritar hasta en tres ocasiones: «¡Cuidado!», en un tono amenazante. Por su parte, Ducrós ha reprochado al alcalde Jaime Martínez reírse durante el debate: «Alcalde, no puede reírse, da mucha pena su actitud. Mantenga las formas, por favor». En este sentido, la regidora de Podemos, Lucía Muñoz, ha añadido que «las risas del PP son una muestra más del desprecio a las víctimas del franquismo».
Antes de la votación, el regidor de Medi Ambient, Llorenç Bauzà, ha defendido que «la diferencia entre nosotros (PP) y vosotros (izquierda) es que nosotros condenamos todos los ataques. El PP condenó desde el primer momento lo ocurrido en le Parlament. Tendrían que empezar a bajar un poquito el tono y reflexionar. Señora Truyol, se ha puesto como una poseída». El rifirrafe ha terminado con una votación conjunta para cada una de las propuestas (y no por puntos como se hizo en la Comisión de Serveis a la Ciutadania, de urgencia), en la que el PP ha votado en contra de ambas.
En un principio no se ha explicado este cambio de voto y el alcalde no ha dejado a Ducrós preguntar por ello al secretario del pleno. Posteriormente, el regidor de Cultura, Javier Bonet, ha declarado que «no vamos a soportar semejantes voces, gritándonos. Ha sido una vergüenza cómo nos han llamado fascistas, ya es suficientemente duro, por lo que hemos decidido al final votar en contra de la propuesta al ver que el PSOE apoyaba los insultos de Més hacia el PP».