La portavoz del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha asegurado este viernes que todos los rebrotes de coronavirus que se están produciendo en España están «controlados», gracias a la preparación del sistema sanitario y de la atención primaria, que está permitiendo detectarlos «precozmente», incluso «en algunos casos siendo las personas asintomáticas».
Eso sí, ha avisado de que hasta que llegue la vacuna, se pueden seguir produciendo brotes. «No es porque seamos personas agoreras sino porque en la gran parte de los países que han estado más adelantados en el desarrollo de la pandemia lo hemos visto, como en China», ha asegurado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros extraordinario de este viernes.
«Seguimos muy atentos de cómo se producen esos brotes, y de cómo se vuelen a controlar porque esto ha sido y sigue siendo un aprendizaje continuo de todos los países que estamos sujetos a esta enfermedad», ha apostillado, al ser preguntada por el aumento de casos que se está produciendo en España estos días en algunos puntos.
La portavoz del Gobierno ya había advertido durante su intervención inicial de que no hay que «bajar la guardia» respecto a las precauciones contra el virus, porque sería un paso atrás». «No podemos relajarnos», ha defendido.
Posteriormente, al ser preguntada por ese repunte de casos en algunas zonas, Montero ha vuelto a llamar a la prudencia, aunque ha reconocido que la posibilidad de que se produjeran rebrotes ya la tenían contemplada, ya que es algo que está ocurriendo también en otros país, y que seguirá pasando hasta que se encuentre la vacuna contra la Covid-19.
Preguntada en concreto sobre cuáles son los criterios que llevarían al Gobierno a tomar de nuevo las riendas de la gestión contra la pandemia, en el caso de que la situación empeore, Montero no ha concretado esta cuestión, y se ha centrado en señalar que los parámetros para evitar una expansión del virus siempre están presentes en el Ministerio de Sanidad y en las Comunidades Autónomos, y son muy diversos.
Eso sí, ha destacado que, por ejemplo, en el caso de «un tema tan sensible» como el de las residencias de mayores, se considera que «un solo caso» ya tiene consideración de rebrote y que, por tanto, «tiene que tener todas las vigilancias por parte del sector sanitario» que exige «una situación de alerta o de alarma de este tipo».
A nivel general, ha explicado que «los criterios sobre los que se entiende que se produce un brote, o a partir de los cual es necesario tomar medidas más drásticas en relación con el aislamiento de una parte de la población siempre han estado presentes en las Comunidades Autónomas y el propio Ministerio de Sanidad».
Esos parámetros, según Montero, «no dependen solo del número de personas que se han contagiado», sino que también dependen de la situación geográfica, del tipo de contactos habituales que establecen y marcan las pautas de aislamiento y cuarentena, y de que no puedan circular las personas que puedan estar inmersas en ese brote.