Los partidos minoritarios participantes en la primera jornada de las consultas con el rey han constatado la imposibilidad de que éste medie para que haya una coalición de PSOE y Unidas Podemos (UP), como ha pedido el líder de la formación morada, Pablo Iglesias, y su pesimismo de que haya acuerdo de investidura.
Los representantes de PRC, Compromís, UPN, CC, PNV y de las confluencias de Podemos -IU, Equo y Galicia en Común- se han reunido con el jefe del Estado en el Palacio de la Zarzuela antes de que mañana, martes, lo haga con los dirigentes de los principales partidos y decida si propone o no nuevo candidato.
El Palacio de la Zarzuela no se ha pronunciado sobre sus reuniones, pero algunos de las formaciones minoritarias que han comparecido ante los medios en el Congreso tras su cita en Zarzuela han coincidido en señalar que el jefe del Estado ha dejado claro que su papel no es el de interceder, sino escuchar a los partidos.
«El rey no va a tomar una decisión que tenga un matiz político. No va a mediar políticamente entre partidos, no es su posición. Su carácter institucional le impide influir en la política. Se tiene que limitar a escuchar», ha afirmado el diputado del Partido Regionalista de Cantabria (PRC), José María Mazón, el único que ha dado por seguro que apoyaría una investidura de Sánchez en caso de haberla.
Mazón ha subrayado que el rey, «como la mayoría de los españoles», le gustaría que no hubiera elecciones, pero «no se muestra a favor o en contra de ninguna opción» que pudiera desbloquear la situación, como sería un acuerdo entre PSOE y Cs.
El representante de Compromís, Joan Baldoví, ha coincidido en que Felipe VI le ha dejado claro que su papel constitucional consiste en «escuchar» a los partidos, «no ofrecer soluciones».
Ante el «poco o nulo» interés de Sánchez en encontrar una salida y el «fracaso» de los equipos negociadores de PSOE y UP, Baldoví ha lanzado una propuesta «a la desesperada» para que los socialistas acepten la oferta de julio de dar una vicepresidencia y tres ministerios a los de Iglesias y estos renuncien «a todo lo demás».
Los representantes de UP -IU, Galicia en Común y Equo- han pasado por alto la oferta de Iglesias de que el rey interceda a favor de la coalición de izquierdas.
La diputada gallega Yolanda Díaz se ha limitado a explicar que «no es una mediación política», sino que la función del rey no sea «una labor meramente burocrática».
Díaz ha asegurado que la confluencia gallega se abstendrá en caso de una hipotética investidura de Sánchez si no negocia con UP.
En cambio, el líder de IU, Alberto Garzón, ha precisado que no tiene fijada su postura si hay investidura porque «no está claro que la vaya a haber».
Tampoco ha concretado una posición el diputado de Equo, Juan Antonio López de Uralde, quien ha explicado al rey que su formación sigue con «la mano tendida» al PSOE para alcanzar un pacto «en el último segundo».
«Pero hay que dialogar y las horas van pasando», ha dicho el dirigente ecologista, quien ha asegurado que «no ha hecho ninguna petición de mediación» a Felipe VI.
En línea con los otros partidos que han acudido hoy a la ronda de consultas, la diputada de CC Ana Oramas ha rechazado la mediación del rey para desbloquear la situación.
«Lo que le corresponde es escuchar, no opinar», ha zanjado la diputada canaria.
El más tajante en el rechazo a la investidura de Sánchez ha sido el presidente de UPN, Javier Esparza, quien ha censurado al líder del PSOE por «volver a optar por EH Bildu», como ya hizo con el gobierno foral, ha dicho, en vez de aceptar la oferta de Cs de abstenerse siempre y cuando los socialistas se desliguen de la izquierda abertzale en la comunidad foral.
«Se demuestra que en julio el PSOE optó por Bildu y en septiembre, el PSOE vuelve a optar por Bildu», ha reprochado Esparza tras recordar que la socialista María Chivite fue investida gracias a la abstención del partido de Arnaldo Otegi.