Con la llegada del verano, muchas personas se plantean si pueden irse de vacaciones mientras están cobrando el paro o un subsidio por desempleo. Aunque estas ayudas no incluyen un derecho a vacaciones como tal, la normativa sí permite salir del lugar de residencia en determinadas condiciones. En concreto, es posible ausentarse de la localidad habitual hasta un máximo de 30 días al año, siempre que se informe previamente al Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE). Para hacerlo, hay que solicitar cita previa y comunicar el desplazamiento. Una vez aprobado, podrás disfrutar de esos días sin que esto afecte al cobro de la prestación.
Desplazamientos al extranjero: ¿Qué debes considerar?
Los desplazamientos al extranjero necesitan un poco más de papeleo dependiendo del tiempo que planees estar fuera. Si el viaje es por menos de 15 días al año, debes comunicarlo al SEPE mediante el formulario de «comunicación de salida al extranjero». Al regresar, acude nuevamente al SEPE el primer día hábil siguiente.
Para estancias en el exterior entre 15 y 90 días, la normativa exige que informes a tu oficina de empleo. Durante este tiempo, la prestación quedará suspendida, reanudándose a tu regreso en las mismas condiciones, sin pérdida de días. La comunicación de salida al extranjero es crucial en estos casos.
Viajes prolongados y sus implicaciones
Si tienes la intención de pasar más de 90 días fuera de España, debes comunicarlo al SEPE. En este escenario, la suspensión podría convertirse en extinción de la prestación, salvo si la razón del desplazamiento es laboral, educativa o de cooperación internacional.
Además, aun en periodo de prestaciones, estás obligado a buscar empleo activamente y a participar en actividades formativas que mejoren tus oportunidades laborales. Esta responsabilidad continúa vigente aunque te encuentres de vacaciones, por lo que un fallo en estos deberes podría resultar en la pérdida de la prestación.
APEl SEPE, el SOIB... no funcionan, no sirven para nada. Estuve algo más de un año en paro, buscando activamente, enviando CV a más de 50 empresas, apuntado al SEPE, al INEM, y soy persona cualificada. Pero.....oh lástima..... tengo más de 45 años.... Así que ahí está el gran problema... El SEPE y el SOIB, organismos públicos, nos llenamos la boca de diversidad e inclusión, pero a la hora de la verdad, los mayores de 45, con formación, nos comemos los mocos. Ellos no hacen nada, te lo puedo asegurar. Por cierto, finalmente decidí romperme los cuernos estudiando y me hice funcionario, harto de esperar una llamada...