La Fiscalía ha pedido hoy cinco años de prisión para el productor cinematográfico Andrés Vicente Gómez, exadministrador de Lola Films y viudo de Concha García Campoy, al que acusa de apropiarse de 270.687 euros que supuestamente pertenecían a una empresa que había absorbido su sociedad.
En la Audiencia de Barcelona se ha iniciado hoy el juicio contra Vicente Gómez, productor de películas como «Jamón, jamón» de Bigas Luna, «El Día de la Bestia» y «La Comunidad» de Álex de la Iglesia o de «Belle Époque» de Fernando Trueba, que conquistó un Óscar en el año 1992.
El acusado fue hasta 2007 administrador único de la productora Lola Films, que en ese año se escindió en dos sociedades: una matriz, Lola Films 2002, que absorbió la compañía que lideraba Vicente Gómez con dos de sus títulos cinematográficos, y Lola Films Internacional, controlada por el productor y que se quedó con los derechos de sus películas.
En 2008, una sentencia de la Audiencia de Barcelona ordenó pagar a Lola Films 270.687 euros que, según la Fiscalía, correspondían a subvenciones del Ministerio de Cultura que estaban bloqueadas a raíz de una demanda por derechos intelectuales que la productora finalmente ganó.
Según el ministerio público, Vicente Gómez encargó a la procuradora y a un empleado suyo que cobraran en metálico esa cantidad, que se hizo efectiva un 24 de diciembre de 2008, a sabiendas de que no era a él a quien pertenecían los 270.687 euros sino a quienes habían comprado su productora.
En su declaración en el juicio, el procesado ha defendido que esa suma, que ingresó en la sociedad Lola Films Internacional que administraba, era para su compañía porque procedían de un pleito del que él se había «hecho cargo» y que había ganado, relacionado con los derechos de las películas de que es titular.
No piensan lo mismo los administradores de Lola Films 2002, que llevaron a Vicente Gómez a los tribunales a raíz de una querella en la que le acusaban de quedarse con 270.687 euros que, según ellos, les correspondían.
José Ramón Carabante, directivo de Lola Films 2002 que hoy ha declarado como testigo, ha explicado que cuando absorbió la compañía de Vicente Gómez no tenía «ni idea» del pleito que mantenía el productor, hasta que intentó cobrar subvenciones del Ministerio y se percató de que estaban embargadas.
En el juicio han declarado hoy la procuradora que, por orden del productor, cobró el dinero del pleito en efectivo, así como la subdirectora de la oficina bancaria que lo pagó, quienes han coincidido en calificar de «excepcional» que una suma de tal magnitud se perciba en metálico.