El Parlament ha instado al Consell de Mallorca a aprobar la proposición de ley para aprobar la limitación de entrada de vehículos en un plazo máximo de seis meses.
Así se ha aprobado en el pleno de este martes a raíz de una moción en materia de movilidad defendida por el diputado socialista Ares Fernández y que algunos de su veintena de puntos han recibido el apoyo unánime de la Cámara autonómica.
El punto relativo a la proposición de ley para limitar la entrada de vehículos a Mallorca que debe impulsar el Consell llega un día después de que el presidente insular, Llorenç Galmés, anunciara que en los próximos días presentará su borrador y lo pondrá en conocimiento de las fuerzas políticas para iniciar su tramitación.
Los diputados, con 49 votos a favor, cinco en contra (Vox) y una abstención, han instado a Galmés a aprobar esta iniciativa legislativa, que deberá pasar por el Parlament, en un plazo máximo de seis meses.
Otro punto que ha salido adelante reclaman al Govern que continúe desplegando de manera prioritaria las medidas previstas en el Plan Director de Movilidad que puedan tener un impacto adelante de forma inmediata, como el incremento de las conexiones ferroviarias, el refuerzo del servicio interurbano o la inversión en infraestructuras ya planificadas.
También han recibido luz verde otros puntos que hablaban de publicar de forma periódica los datos de ocupación de los autobuses del TIB, reforzar las plantillas del SFM convocando nuevas oposiciones o continuar con la transición energética de la flota de autobuses del TIB.
Asimismo, el Parlament ha aprobado instar al Govern a ampliar el servicio y la frecuencia de los autobuses del TIB y los trenes del SFM en horario nocturno, a llevar a cabo las gestiones necesarias para incrementar el personal del metro de Palma para aumentar su servicio durante los fines de semana.
Por el contrario, han decaído los puntos que buscaban constatar el «colapso» que sufren las carreteras de Mallorca y la «saturación» de su transporte público y tomar medidas para paliar estas situaciones, como reforzar las líneas más «tensionadas» del TIB o ampliar el personal de la red de transporte público.
Tampoco han recibido la aprobación de la Cámara aquellos que hablaban de retomar el proyecto del tranvía en Palma, reconocer que la gratuidad del transporte público ha sido «una de las medidas más eficientes para mejorar e impulsar la movilidad sostenible» y constatar «la falta de voluntad del Govern» para consolidar este modelo.
En la misma línea, ha decaído la posibilidad de instar al Ejecutivo de asumir las conclusiones del estudio de carga viaria realizado por el Consell de Mallorca y acompañar a la institución insular en la aplicación de las medidas ahí contempladas o de presentar, en seis meses, un proyecto de ley para gravar a los vehículos turísticos.
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