«Los jóvenes de Baleares no quieren ser fontaneros porque creen que tiene poco prestigio». Así de claro lo tiene José Puerta, presidente de la asociación Infocal, que engloba a industriales, instaladores de fontanería, calefacción, climatización, gas, protección contra incendios y afines, así como a instaladores relacionados con la construcción y la industria en Baleares. En este sentido, destaca que a «las empresas les resulta cada vez más difícil cubrir las vacantes con personal cualificado» y avanza que este «será un desafío importante durante los próximos años, ya que nos encontramos que no hay relevo generacional».
A su modo de ver, la falta de personal en su sector «es un fenómeno que se ha intensificado por varios motivos». Uno de ellos es que «la fontanería no se percibe como una formación atractiva, es más, muchas personas jóvenes no se sientan atraídas por la profesión porque lo perciben como un trabajo físicamente exigente y con poco prestigio. Diversos informes apuntan a que los jóvenes no se quieren dedicar a trabajar en obras y cada vez escasea más la mano de obra cualificada».
En este sentido, apunta que «la falta de un reconocimiento adecuado de la importancia del trabajo de fontanería contribuye a la falta de interés de nuevos profesionales de ingresar en el sector». Esto motiva una falta de relevo generalizacional. «Muchas personas en el campo de la fontanería se están jubilando y no hay relevo generacional. Los fontaneros experimentados, a menudo, se retiran sin que los jóvenes sigan sus pasos, lo que crea una brecha generacional». Puerta resalta que «en Infocal tenemos a más de 300 empresas asociadas y una de las peticiones más recurrentes por su parte es por la demanda de trabajadores cualificados».
Problemas para contratar un fontanero
Esto está generando dificultades a la hora de contratar un fontanero en Baleares, ya que no hay sufiencientes. El presidente de Infocal reconoce que «hay retraso en todo el sector. En verano para la instalación de aires acondicionados y en invierno para revisar calefacciones; pero también para cubrir pequeñas reparaciones como podría ser desatascar un fregadero o cambiar un termo». Preguntado por el tiempo de demora, responde que «dependerá mucho de la empresa, pero oscila entre 10 y 15 días». Además, admite que «en numerosas ocasiones nuestros asociados no pueden aceptar algunos trabajos por no tener suficientes operarios. Hay más demanda que profesionales que puedan llevar a cabo las peticiones».
¿Cómo podría solucionarse?
Respecto a las posibles soluciones, Puerta señala que «para abordar la falta de personal en el sector de la fontanería es fundamental implementar una serie de medidas estratégicas. Lo primero de todo es mejorar la percepción de la profesión; es importante cambiar la imagen negativa de las profesiones técnicas y manuales. Las campañas pueden enfocarse en destacar el valor y la importancia de la fontanería en la sociedad, resaltando que se trata de una profesión técnica y esencial para el bienestar de la comunidad y un reto para cumplir con la transición energética y las nuevas tecnologías».
También considera importante «promover el desarrollo profesional. Los jóvenes deben saber que el sector de la fontanería ofrece buenas oportunidades de carrera, crecimiento y estabilidad laboral, además de la posibilidad de iniciar su propio negocio. Otra solución pasa por tener el apoyo de los orientadores de los centros para que les den a conocer la formación profesional o la dual en el sector de las instalaciones».
Además, destaca que« la asociación de instaladores Infocal, junto a varias organizaciones, trazan convenios para poder llevar a cabo el objetivo de formar y captar talento para cubrir la falta de personal. Jóvenes y mayores son necesarios para gestionar la transición energética. Para ello, estamos en desarrollo de programas para cualificar a jóvenes entre 18 y 29 y también a mayores de más de 45 años».