«Hay una sensación general en Mallorca de que nos hemos pasado y tenemos que dar marcha atrás». Con estas palabras resumía Jaume Garau la percepción ciudadana sobre la masificación turística y los crecientes problemas que están generando para los residentes. El integrante de Palma XXI ha sido uno de los portavoces del Fòrum de la Societat Civil que hoy ha presentado el I Congreso de Turismo de la Sociedad Civil del próximo 26 de junio, iniciativa pionera en todo el Estado que pretende animar el debate social sobre la sostenibilidad de la actividad turística tal y como se está desarrollando a día de hoy y que en Mallorca ya está dejando numerosas muestras sobre la saturación que padece la Isla nada más arrancar la temporada alta. Carreteras congestionadas, buses llenos, playas repletas... «Llegará un momento en que la gente de aquí no podrá ir a ningún sitio».
Garau, que ha comparecido en rueda de prensa en el Estudi General Lul·lià (espacio que acogerá el congreso) junto con Joana Maria Palou, Margalida Ramis y David Abril, ha explicado que durante las próximas semanas se desarrollarán diversas actividades e iniciativas como preámbulo al congreso, el cual tiene como objetivo elaborar un documento de propuestas abierto a todas las entidades y asociaciones civiles y a la ciudadanía en general que defina las estrategias a seguir para definir un modelo turístico sostenible y compatible con el bienestar social de los baleares.
Este documento ya parte de un texto base que aspira a ser enriquecido y ampliado durante el congreso con las aportaciones de sus participantes. Por lo pronto, el documento inicial recoge propuestas como la reducción de la flota de coches de alquiler o la destinación de una parte de la ecotasa a un fondo para la diversificación económica de las Islas. En el primer caso se pone como ejemplo el trabajo hecho en Formentera en este sentido que, se considera, «sería muy fácil copiar» a través de un análisis de la capacidad de carga de las carreteras. Asimismo, también se propone ligar la reducción de plazas hoteleras con la creación de vivienda social.
«El turismo debe decrecer y reconvertirse», ha señalado Ramis para explicar que durante el debate se tocarán cuestiones capitales para la sostenibilidad turística como la reducción de plazas turísticas, las políticas de mercantilización del suelo, la preservación de espacios naturales protegidos, el ciclo del agua, los fondeos en aguas baleares o los efectos del cambio climático. Una cuestión, esta última, que «afecta también a la oferta y la demanda», refiriéndose por ejemplo a la desestacionalización y al incremento de las llegadas en los meses iniciales y postreros de la temporada debido al alza de las temperaturas. Asimismo, destacó el «gran reto» que tiene toda la zona litoral por su especial vulnerabilidad al cambio climático.
Para David Abril, «el turismo es algo más que una actividad económica», ya que, por ejemplo, «no puede separarse de cuestiones como la inmigración o la vivienda». Asimismo, subraya que el sector turístico ha ido ganando peso en detrimento del resto de sectores económicos y que los actuales problemas de saturación, compartidos en otros destinos punteros del planeta, «son un toque de atención final en lo que está siendo una tendencia mundial».
«Temas como el decrecimiento son cuestiones que cuesta mucho abordar, pero es imprescindible hacerlo para reconfigurar el turismo», señala Ramis para añadir que «hay que valorar qué plazas están obsoletas y de qué manera hacer que sea atractivo para sus propietarios ponerlas fuera de circulación».
Asimismo, Garau aboga por adaptar el tamaño de los cruceros a la isla, puesto que «a nadie se le ocurriría poner ahora dos hoteles de 500 plazas en la Bahía de Palma, que es precisamente lo que tenemos cuando llegan estos megacruceros».
El congreso, con el apoyo de Caixa Colonya, contará con la presencia de Fernando Valladares, profesor de investigación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) que ofrecerá una ponencia. Asimismo, desde el Fòrum se hace hincapié en que debe ser un espacio abierto a todo el mundo, por lo que también se ha invitado a quienes consideran que deben ser parte crucial de la solución, incluidos representantes del Govern y del Consell de Mallorca, así como a la Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM) o a la patronal del alquiler turístico, FEBHATUR.