El representante en España de la principal asociación de cruceros del mundo Cruise Line International Association (CLIA), Alfredo Serrano, afirma que el cambio de Govern en Baleares abre un nuevo ámbito de actuación con la actual regulación de las escalas de cruceros en los puertos de Baleares. Serrano explica que el acuerdo con el Govern del Pacte cerró el calendario de llegadas de buques diarios a los puertos: «La regulación pactada a finales de 2021, que se ratificó y firmó a mediados de mayo de 2022, fijó tres escalas diarias de cruceros, uno de ellos un megacrucero. La medida afectó de lleno al puerto de Palma y las navieras lo están cumpliendo este año a rajatabla, principalmente porque no hay días excepcionados, en los que podían coincidir más de tres cruceros».
Serrano, sin embargo, señala que «estamos abiertos a cualquier petición sobre Palma, de ahí que lo que decida el nuevo Govern lo acataremos y aceptaremos lo que dictamine en cuanto a la llegada de más cruceros». Puntualiza que la programación de escalas no se puede realizar de un día para otro «ya que hay que hacerla con tiempo suficiente para poner en marcha todo el proceso de comercialización y venta». Resalta que la reducción de escalas en este ejercicio es más que notable sobre 2019, año de referencia. Así hay previstas 790 escalas de cruceros a nivel balear, frente a las 820 de prepandemia.
Puerto base
Un hecho que destacó el director de CLIA España es la evolución de los cruceros base en Palma: «El número de cruceros base, con origen y llegada al puerto de Palma está creciendo, lo cual tiene un impacto económico en Palma y en Mallorca. Mientras un turista de tránsito realiza un gasto diario de 70 euros, el gasto de un turista de crucero base llega hasta los 200».
La patronal del pequeño y mediano comercio de Mallorca (Pimeco), por su parte, ha pedido al nuevo Govern potenciar el turismo de cruceros y ferris, así como no penalizar su implantación y «cambiar la política actual que limita la llegada de escalas a Palma». El presidente de Pimeco, Antoni Fuster, pide a la presidenta del PP, Marga Prohens, que «no haga políticas que pongan en riesgo a la principal fuente de riqueza de las Islas, el turismo». Fuster asegura que apuestan por los cruceros «porque son una fuente de ingresos para el comercio».