Unos operarios encontraron esta semana en las lagunas del campus de la UIB un ejemplar de tortuga de caparazón blando de Florida, Apalone ferox, una especie exótica cuya liberación en el entorno natural o urbano está tipificada como delito en el Código Penal.
El ejemplar es una hembra adulta de 5,6 kilogramos y 37,5 centímetros de caparazón que llevaría varios años viviendo en esa zona, seguramente liberada por un propietario que no quiso continuar con ella al adquirir cierto tamaño.
El hallazgo fue comunicado a Samuel Pinya, del Grup d'Ecologia Interdisciplinària de la UIB, que a su vez se puso en contacto con el Consorci de Recuperació de Fauna de les Illes Balears (Cofib) para que se hiciera cargo de ella.
Pinya explicó que «Mallorca es la única isla mediterránea donde se han detectado ejemplares de esta especie y es la segunda vez. La primera tuvo lugar en mayo de este mismo año en Andratx».
El profesor y biólogo recordó que «en estas lagunas de la UIB ya se han encontrado varias tortugas de Florida, pero de la especie más conocida, que es más pequeña que la de caparazón blando. De estas tortugas de Florida también se ha hecho cargo el Cofib».
Samuel Pinya indicó que «la tortuga de caparazón blando de Florida es una depredadora y supongo que en las lagunas del campus debía alimentarse de crías de pato o ratones. Cualquier animal de pequeño tamaño le sirve para alimentarse. Siempre está vinculada a espacios húmedos y tiene una gran capacidad para alargar la cabeza y para morder. De ahí su nombre científico ferox».
Algunas observaciones apuntan a que podría haber otro ejemplar de tortuga de caparazón blando de Florida en las lagunas del campus, pero no han sido confirmadas. Cualquier observación de una especie exótica debe ser comunicada al Cofib o informar a Biodibal.
De mallorquí, no en tens ni la soca ni l'arrel.