Un total de 84 familias, con menores de 6 años que necesitan atención temprana para paliar sus problemas de desarrollo, tienen algo más de un mes para escoger un nuevo centro al que llevar a sus hijos, debido a que la Conselleria de Serveis Socials no renovará el concierto a APNAB (Asociación de Padres de Niños Autitas)-Gaspar Hauser porque carecen de la autorización del IMAS (Institut Mallorquí d'Afers Socials).
La consellera de Serveis Socials, Fina Santiago, y parte de su equipo, se reunieron ayer tarde con unos 50 padres, y el lunes harán lo mismo con otros 14, para informarles de la situación y explicarles que los menores serán derivados a otros centros y no se quedarán sin servicio.
«No es que no queramos renovar el concierto, es que carecen de la autorización necesaria para ello, algo que sí han conseguido otras 11 asociaciones», afirmó ayer Santiago.
Por su parte la presidenta del IMAS, Margalida Puigserver, explicó que «les hemos dado un año de plazo, pero seguimos sin poder darles la autorización porque no han presentado toda la documentación requerida ni han subsanado las deficiencias».
APNAB-Gaspar Hauser ha remitido un escrito a los padres afirmando que «estamos pendientes de un trámite administrativo con el IMAS» y que su intención es continuar prestando servicio.
La reunión de ayer fue tensa. Los padres pedían explicaciones a Santiago sobre el futuro de la atención temprana de sus hijos. «Lo que queremos es que nos garanticen que nuestros hijos van a continuar recibiendo las terapias que tenían hasta ahora», afirmó uno de los padres.