El Govern ignorará el llamamiento del empresario hotelero Gabriel Escarrer, presidente del Grupo Meliá –que gestiona el Palacio de Congresos de Palma– para no incrementar el impuesto turístico o ecotasa. Así lo confirmó este martes el vicepresidente y conseller de Turisme, Biel Barceló. Escarrer aprovechó el lunes su intervención en la inauguración oficial del Palacio de Congresos, en presencia de los Reyes, para cuestionar la ecotasa y su incremento. Pero Biel Barceló no le hará caso. Este martes dijo que se doblaría en temporada alta (de mayo a septiembre) y que quedaría igual el resto del año. Sobre el comentario de Escarrer dijo: «No me sorprende pero sobraba. Es un concesionario público y ese no era el momento ni el lugar».
MÉS anunció una iniciativa parlamentaria. David Abril, coportavoz del grupo, aseguró que «Escarrer no es nadie para dar lecciones al Govern sobre política fiscal» y que había decidido acelerar los trámites que su grupo presentó hace tiempo y que afecta a la amnistía fiscal a la que se acogieron varios empresarios, entre ellos el presidente de Melià. Se trata de una proposición no de ley (que ahora se tramitará por el procedimiento de urgencia) para que, en otras cuestiones, el Parlament inste a la Agencia Tributaria del Estado para que «acredite si la declaración del modelo 750 por parte de la familia Escarrer se realizó de forma veraz y completa mediante la verificación al cargarla al Plan de Inspección Tributaria y revise si hay otros contribuyentes o empresas en su misma situación».
Podemos, a través de su portavoz, Laura Camargo, se mostró de acuerdo con la iniciativa. «Escarrer tenía buena oportunidad para pedir disculpas por llevar el dinero que es de todos a Panamá pero, en lugar de eso, se dedica a insultar al Govern y a la presidenta de Balears diciendo que estaba en contra de una decisión tomada por mayoría en esta Cámara», indicó Camargo quien se felicitó de que «ahora los hoteleros ya no dictan las leyes». Los socialistas también mostraron su incomodidad por las declaraciones de Escarrer pero evitaron un pronunciamiento tan claro. Desde la Presidencia se informó de que «no fue adecuado» pero que la presidenta no añadiría «nada nuevo» a lo que ya dijo. Armengol pidió que los beneficios del turismo redundaran igualmente en las nóminas del personal.