«El día que pretendan desmontar el monumento al crucero Baleares mi familia y yo nos encadenaremos para impedirlo», aseguró este martes Mateo Mesquida, hijo de Miguel Mesquida, uno de los marineros embarcado en este barco de guerra durante la Guerra Civil y que sobrevivió a su hundimiento en el año 1938.
Mateo Mesquida se indignó muchísimo cuando leyó en Ultima Hora que la asociación Memoria de Mallorca consideraba que todos los miembros de la tripulación de este crucero «son responsables de crímenes contra la humanidad y de guerra cometidos a lo largo y ancho de la costa mediterránea».
«Me molesta que siendo mi padre un marinero, fogonero en las calderas del crucero, se le llame criminal de guerra, no lo aguanto», asegura. «Yo quiero honrar a mis muertos, que no me los toquen. Y si otra persona quiere honrar a los suyos me parece muy bien, pero sin meterse con los míos», reclama.