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‘Sicília sense morts' bucea en las cloacas del poder con atmósfera «mediterránea»

Lluís Prieto dirige esta esperada serie de IB3 basada en el libro de Guillem Frontera y que se estrenó ayer en el Atlàntida Film Fest

El equipo de la serie ‘Sicília sense morts’ posó en el estreno de la esperada ficción en el patio de La Misericòrdia. | M. À. Cañellas

| Palma |

Desgraciadamente, estamos muy acostumbrados a ver en la televisión casos de corrupción, aunque en un formato real, periodístico. En cambio, no son tantas las ficciones que ahondan en esas tramas, en esas cloacas. Lo reconoce Lluís Prieto, director de una de las series más esperadas del año: Sicília sense morts, basada en la célebre novela de Guillem Frontera, colaborador de este periódico. Se trata de «el primer thriller político de IB3», en palabras de Joan Carles Martorell (director de IB3 Televisió), y cuenta con la producción de Nova Producciones y la participación de TV3, À Punt y Filmin. Este viernes por la noche se estrenaron los dos primeros capítulos –tiene ocho en total– en La Misericòrdia, dentro del Atlàntida Mallorca Film Fest.

«La novela de Guillem Frontera obviamente está inspirada en sucesos reales y en una época que podemos reconocer, pero la intención no es señalar a nadie, sino mostrar cómo las personas entran dentro de un juego y cómo el propio mecanismo social que tenemos fomenta este tipo de comportamiento. Al final, no se trata de justificar ni de juzgar, simplemente de que el espectador forme parte de esto», apunta Prieto.

Joan Carles Martorell (IB3), Lluís Prieto (director de la serie) y César Martín (À Punt), este viernes en el Parc de la Mar. Foto: Miquel Àngel Cañellas

Secretos

La trama de Sicília sense morts arranca cuando el joven presidente de Baleares, José Antonio Bergas, recibe una caja con una rata muerta. Este hecho desencadena una investigación periodística que sacará a la luz las miserias de una serie de personajes corruptos sobre los que gravita el poder en las Islas. En esta historia, todos los personajes tienen secretos, tienen algo que ocultar, y la corrupción supura por todos lados, en la política y también en el periodismo y los medios de comunicación. «En una conversación con Joan Carles [Martorell] sobre esta cuestión, llegamos a la conclusión de que todos somos bastante miserables. Nadie está libre de pecado. La excepción sería Aina Garcías [la periodista que investiga el caso]. Hay como una lucha para intentar no caer en lo que todo el mundo cae. Y a veces se consigue y otras no», añade el director de la serie. «Aina Garcías es interesante porque es una persona que conserva la ilusión, ojalá no fuera algo utópico, aunque parece que al final sí lo es. Quiere hacer las cosas bien, como muchos otros, pero la vida a veces te conduce a situaciones en las que no todo depende de ti. En ese sentido, los personajes reflejan bien la miseria humana», matiza.

El actor Félix Pons protagoniza 'Sicília sense morts'.

Asimismo, Prieto comenta que, hablando con César Martín [director de contenidos de À Punt], este decía que además del espectador balear, el valenciano también se verá identificado en la serie. «Porque, al final, tiene este olor muy mediterráneo y antiguo. En la actualidad no es así, pero antes de la expansión turística, en los años 50 y 60, Mallorca tenía mucha más conexión con Sicilia y Marsella que con la Península. Por eso creo que todos estos pueblos del Mediterráneo tienen algo que cuando vean Sicília sense morts se verán reconocidos, y no siempre para bien».

La presidenta Armengol –en el centro, junto a Guillem Frontera– asistió al evento junto a otras autoridades.

Y es que Mallorca bien podría definirse como una Sicilia sin muertos. «Hay todo un entramado de relaciones de intereses que no necesitan armas ni violencia explícita para llevarse a cabo. Eso lo hace incluso más maquiavélico porque se da en entornos más familiares, con muchos compromisos y en base a la importancia de quedar bien». De hecho, el jefe del partido en Madrid le regala a José Antonio Bergas el famoso libro de Nicolás Maquiavelo, El príncipe. «Hace referencia a ese pensamiento de realmente tener la capacidad fría de manipular o de controlar las situaciones. En ese sentido, esta famosa escena en la que, personalmente, veo la humanidad en él, porque tiene la intención de usar el libro, aunque este finalmente se vuelve contra él», detalla Prieto.

Antes de la proyección en La Misericòrdia, el autor de la novela, Guillem Frontera, y el director de IB3 Ràdio i Televisió, Andreu Manresa, protagonizaron una charla con el público.

Ridículo

A pesar de ser un thriller oscuro, hay determinadas situaciones o comportamientos que harán que el espectador no necesariamente se vea reconocido o identificado a sí mismo, pero sí su entorno social y político que le provocarán una media sonrisa. «La novela también tiene ese punto de que, cuando nos vemos en el espejo, sentimos un cierto ridículo. Fuera de contexto hace gracia. Sin hacer daño a la narrativa hemos incorporado ese aspecto con naturalidad. Porque, al final, es gente normal y corriente. No todo es perfecto», avisa el director. Para Joan Carles Martorell, precisamente, «una de las virtudes de la adaptación es que la novela se toma en serio a sí misma, pero en el audiovisual toma un punto irónico, aunque sutil». En esta línea, Prieto puntualiza que «es un proceso que tiene que ver con la empatía. Los personajes te pueden hacer reír, te pueden preocupar o te puedes enfadar con ellos. Tienes que poder tener un abanico de sensaciones que lo hacen real». «Hemos intentado ir más allá del contenido del guion, del diálogo. El lenguaje audiovisual es más universal que el de las palabras. Venimos de una novela, hecha de palabras, y lo queremos conservar, pero queremos también añadir sensaciones y, sobre todo, experiencia, pues el audiovisual lo permite, con la composición musical y el diseño sonoro», añade Prieto. De esto se ha encargado magistralmente Tolo Prats, que otorga el punto de suspense y la «visceralidad».

Novedad versus normalidad

Como señalaba Joan Carles Martorell, Sicília sense morts es el primer thirller político de IB3, algo que prefiere ver más como una muestra de «normalidad» que como una novedad. «La BBC hizo House of Cards y Canal + Crematorio. Está bien que en la televisión pública balear también tengamos nuestro thriller político». En este punto, Lluís Prieto admite que «Treufoc, aunque era un thriller más policial, también tocaba algunos palos que están en Sicília. Ya planteábamos que siguen existiendo los poderes fácticos como Can Amunt y Can Avall, que tenían un control más allá y por encima de la clase política. Esa Mallorca antigua, presente todavía hoy en día. Treufoc gira en torno a una teoría, en cambio, Sicília habla más de lo de abajo, es más práctica, más conocida y más real. No necesita una teoría para explicarse porque es la vida real, del poder, de las relaciones con los medios de comunicación, de cómo se van moviendo los intereses de la sociedad según las circunstancias».

Prieto confiesa que no es muy optimista respecto al panorama políticosocial y declara que «como sociedad, creo que vamos en una dirección que no ayuda a que las cosas se arreglen, está equivocada en muchos aspectos. Sin embargo, en distancias cortas, con mi trabajo, he podido conocer a mucha gente diferente y, en ese sentido, sí crees que todo es posible». Está previsto que la serie completa, compuesta de ocho episodios, se estrene este otoño en IB3 Televisió, À Punt y TV3. Después, estará disponible en Filmin. «De momento es una serie, luego ya veremos si se queda en serie o miniserie, dependerá de si funciona», avanza Martorell. Sobre cómo recibirán los mallorquines esta ficción, Prieto asegura que «estoy muy tranquilo, porque es una producción muy profesional y la novela es de un prestigio comprobado. Evidentemente podrá gustar o no, porque eso es subjetivo. Yo mismo soy bastante crítico, pero estoy seguro de que la gente entenderá su valor y tendrá una buena acogida. La gente es imprevisible, pero estamos tranquilos y orgullosos».

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