La Guardia Civil ha retirado efectivos del dispositivo especial que ponía en marcha el lunes tras la muerte violenta de un joven de 19 años en las fiestas patronales, hechos por los que hay un detenido de 23 años y se produjeron altercados en la noche contra viviendas del entorno familiar de este último, pero mantiene la vigilancia. «Estamos en unos momentos todavía sensibles», ha señalado la subdelegada del Gobierno en Granada, Inmaculada López Calahorro.
A preguntas de los periodistas, López Calahorro ha resaltado que en el multitudinario funeral de la víctima este pasado lunes por la noche «todo transcurrió tranquilamente» si bien se mantiene la «alerta», aunque «no con todo el personal» movilizado en la tarde del martes, cuando vinieron agentes de otras provincias.
Se está «protegiendo», como es habitual en estos casos, especialmente las zonas que puedan ser más conflictivas, si bien, ha agregado la subdelegada, se confía en que va a proseguir el clima de «tranquilidad» que hay en el pueblo, de unos 10.000 habitantes.
Las fuentes consultadas por Europa Press en la Guardia Civil han indicado por su parte este miércoles que lo prioritario en este momento es la investigación sobre el supuesto homicidio, por el que permanece en calabozos de la Comandancia de Granada el detenido, que se entregaba pasado el mediodía de este martes, y que no está previsto que pase a disposición del juez antes de este jueves.
Por otro lado, hay una investigación en curso por los altercados del lunes por la noche, por los que hay varios identificados. López Calahorro ha detallado a este respecto, en sus declaraciones a los periodistas, que la «Guardia Civil estuvo haciendo identificaciones» y «procederá abriendo esas diligencias también en su momento».
En cuanto a la pelea previa a la muerte del joven fallecido --tras ser golpeado, caer al suelo e impactar su cabeza contra un bordillo--, de la que se señaló que hubo un herido, que no llegó a ser trasladado al hospital, «no hay», según ha detallado la subdelegada, denuncia.