Es el ejemplo de que desde Mallorca se puede triunfar en el resto del mundo. La compañía Playspace está formada por un grupo de desarrolladores de juegos para el móvil que se venden en países como Italia, Estados Unidos o Canadá. Para participar en esta edición de Connect’Up Grow, apuestan por el desarrollo de Bingo DreamZ, un juego de bingo social gratuito basado en el modelo anglosajón de Bingo 75, que está disponible en dispositivos móviles Android y IOS.
Tal y como señalan Marc Puig, productor de Loco Bingo & Bingo DreamZ, y Alfonso Villar, director ejecutivo y cofundador de Playspace, «el proyecto Bingo DreamZ comenzó a desarrollarse a principios de 2018 y su lanzamiento al público se realizó a finales de marzo de 2019, poniendo el foco en el mercado estadounidense».
Bingo DreamZ es un juego multiplataforma y multijugador en el que el usuario puede explorar diferentes mundos de sueños, tratando de recopilar los mejores recuerdos de su protagonista. Para ello, tendrá que jugar al bingo y competir con gente de todo el mundo para ganar premios. El usuario navegará por diferentes mundos, que van desde las profundidades del océano consiguiendo todos los tesoros escondidos o endulzar tus partidas recogiendo todos los caramelos en un sueño de gominolas.
Supone una vuelta de tuerca al bingo tradicional, en el que el jugador puede chatear con sus amigos y conocer gente nueva. Y si desea un un jugador único, podrá personalizar el perfil y los cartones con personajes y objetos. El juego ofrece múltiples potenciadores que ayudarán a alcanzar las metas y hace las partidas mucho más emocionantes.
Desarrollo
Alfonso Villar señala que «Playspace es una empresa de juegos sociales que en 2011 lanzó su primer juego para Facebook. Era gratuito y el usuario debía pagar por contenidos adicionales como vidas virtuales, corazones, monedas o fichas personalizadas para mejorar la experiencia de juego».
Mientras los juegos de granjas vivían su propio despegue, la mallorquina Playspace apostaba por un hueco importante: los juegos latinos como el chinchón, el dominó, el parchís e incluso el truc.
«Después de los juegos de Facebook, llegamos a un acuerdo con Twenty, la red social española, y nos convertimos en su proveedor número 1 en la red, lo que nos permitió crecer y adquirir más financiación para seguir creciendo», explica Villar sobre un periodo que se alargó hasta 2014. A partir de ese momento, observan una nueva tendencia: Candy Crush es un fenómeno mundial y el futuro de estos juegos está en el móvil.
«Transicionar la empresa hacia movil first (el móvil primero) nos llevó bastantes años», explica el director ejecutivo de la compañía mallorquina.
En 2017, más del 50 por ciento de los ingresos de Playspace provenía de plataformas móviles como Google y Appstore. Ahora mismo, el móvil supone el 90 por ciento.
«Éramos los líderes en nuestro género, los de juegos tradicionales para móvil. En nuestros juegos no se apuesta dinero», aclara Villar. El jugador tiene acceso a monedas virtuales que puede comprar o puede obtener si invita a amigos o espera un tiempo para seguir jugando.
«En Bingo DreamZ solo tenemos un 2 por ciento de pagadores y tenemos 150.000 personas que juegan diariamente. El resto de nuestros ingresos, el 98 por ciento restante, provienen de la publicidad», explica Villar.
Tuercas
Frente a aquellos juegos que enganchan por las apuestas económicas, en el caso de los usuarios de PlaySpace lo hacen «para entretenerse. No pueden jugarse dinero».
Son un referente en juegos tradicionales y de mesa desarrollados en el móvil. Ahora, con su experiencia y sus cifras, Playspace ya planea su siguiente paso. Después de ser líderes en España e Italia en esta categoría lúdica, quieren hacerse con Estados Unidos.
De esta manera, «en 2018 nació Bingo DreamZ, un juego de bingo enfocado al mercado americano con diferentes niveles que están en un mundo de sueños y aventuras. El jugador colecciona recuerdos a medida que avanza. «Hemos tardado un año en desarrollar el juego y ahora lo prelanzamos en Canadá para validar su funcionamiento. En marzo abriremos el juego al mercado americano», explica Villar. Ahora es el momento de «ajustar tornillos» para lograr el éxito americano.