La pandemia no ha podido con la celebración del ascenso a Primera División del Real Mallorca. A pesar de las medidas de seguridad, muchos aficionados se han acercando a la plaza de las Tortugas para celebrar el regreso a la categoría máxima del equipo mallorquín.
La Policía ha colocado vallas alrededor de la icónica fuente, aunque eso no ha impedido que poco a poco vayan apareciendo seguidores ataviados con bufandas bermellonas.
Manifestarse para pedir que nos dejen trabajar, es un peligro para la sanidad pública. Hacer fiesta multitudinaria por el fútbol, está permitido y no pasa nada. En fin... Supongo que serán cosas de la nueva normalidad