El tenista suizo Roger Federer salvó al siempre incómodo Ivo Karlovic y acompañará a Rafael Nadal en los octavos de final del Abierto de Australia, tras ganar al jugador croata por 7-6(6), 7-5 y 6-3, tras 2 horas y 17 minutos.
El partido respondió a lo que se esperaba. Karlovic siempre es un jugador muy incómodo en este tipo de superficies y Federer debía de tomárselo con calma, esperar su oportunidad y que su mayor calidad fuera madurando el encuentro a su favor.
El primer set fue evolucionando inexorablemente hacia el desempate después de que ambos jugadores se mostraran intratables al servicio, sin conceder opción alguna a su rival. Ahí tuvo su oportunidad el 'gigantón' croata que dispuso de punto de set, pero Federer se agarró a la pista y sumó tres puntos consecutivos para cerrar la manga.
Poco varió el devenir del segundo set respecto al del primero. Pero cuando parecía que éste se decidiría de nuevo en el desempate, el de Basilea rompió el servicio de Karlovic en el duodécimo juego y se distanció en el marcador dos sets arriba.
Karlovic sabía que sólo un milagro podría impedir su derrota y no fue el caso. Un temprano quiebre de Federer en el cuarto juego fue ya la puntilla para el jugador balcánico. En octavos de final, el tenista helvético se medirá al vencedor del partido entre el jugador local Bernard Tomic y el ucraniano Alexandr Dolgopolov.