En la Sala de Música de Can Balaguer(Palma), Fito Conesa y Felipe Mora llevaron a cabo una intervención con el histórico órgano Walcker.
Se trata de un proyecto y una representación única que se vincula con la obra audiovisual que conecta con la videoinstalación que Conesa expone hasta final de agosto en la Fundació Miró. El concierto performático se llevó a cabo abrazando la idea de naumaquia.

Margalida Moll, María Elena Ximelis y Janice Mcnab disfrutaron
con la ‘coreografía’ realizada con el órgano del Can Balaguer.
El artista, junto a Mora, musicólogo y creador, ofreció una interpretación a cuatro manos de una pieza creada ex profeso para el órgano del casal de Ciutat.
Gori Vicens, Felipe Mora, Fito Conesa, Isabel Pérez y Fernando Gómez de la Cuesta, ante el órgano ‘Walcker’ de 1930.
Reverberaron el órgano ofreciendo un repertorio de sonidos con aire afinado y patrones rítmicos enfrentados que llenaron de arte la sala. Felipe Mora es un organero y musicólogo con amplia trayectoria en la organización de eventos culturales.
Shawdi Honari, Juan Prieto, Cecilia Forteza y Nicoletta Turello.
Conesa, con Anòxia, acords per a una naumàquia invita a repensar, cuestionar y sentir el aire que necesita el instrumento y el aire que le falta al mar.
Antònia Maria Perelló, Felipe Mora, Fito Conesa, Pilar Rubí e Isabel Pérez, ante el ‘tatarabuelo de los sintetizadores de hoy en día’.
Es un canto visual que se explaya en glissandos térmicos sobre las oscuridades que se avecinan. Eugenia Planas