Mallorca suma año tras año nuevas razones para posicionarse como destino predilecto de quienes buscan privacidad, exploración cultural y autenticidad en España. Su rincón más emblemático volvió a ser objeto de atención tras acoger a una prominente pareja compuesta por Richard Gere y su mujer Alejandra Silva, entusiasmando tanto a los fans del turismo exclusivo como a los enamorados de la naturaleza mediterránea.
Ubicado en la pintoresca zona de Formentor, este hotel acaba de vivir una de las reformas más ambiciosas vistas en el archipiélago balear en los últimos años. Tras más de 100 años alzándose como lugar de retiro para personalidades e intelectuales —desde líderes mundiales como Churchill a leyendas de Hollywood como Audrey Hepburn—, el establecimiento se estrenó el año pasado bajo la gestión de Four Seasons con una imagen revitalizada, manteniendo su icónico marco de pinos y vistas deslumbrantes al Mediterráneo.
No solo la arquitectura histórica y el legado cultural del hotel han sido restaurados, sino que también se han incorporado servicios de última generación: spa, restaurantes gourmet y suites exclusivas equipadas para garantizar la máxima desconexión. De una inversión superior a 350 millones de euros surgen 110 habitaciones; sin embargo, sólo una parte estuvo disponible en la fase inicial de reapertura, lo que ha contribuido a mantener una atmósfera aún más selecta hasta la inauguración al completo, que está prevista para marzo de 2025.
Una playa que encierra el espíritu de Mallorca
La playa de Formentor forma parte inherente de este enclave mágico. Rodeada de exuberantes bosques mediterráneos de pinos, la playa deslumbra por la pureza de sus aguas turquesas y la textura inmaculada de su arena. Su relativa inaccesibilidad y la limitada capacidad permiten el disfrute de jornadas serenas y exclusivas, alejadas del habitual bullicio estival de las playas de España.
Este paraje sigue ganando notoriedad no solo por su belleza paisajística, sino también porque es posible sumergirse en actividades como snorkel, paddle surf o simples paseos bajo la sombra de la arboleda. En verano, la exclusividad se refuerza gracias a la regulación del tráfico y límites de aforo, velando tanto por el patrimonio natural como por una experiencia relajante para los huéspedes y visitantes.
Viajar con privacidad y lujo: la tendencia que marca Mallorca
En un contexto donde la búsqueda de destinos seguros y alejados del turismo masivo sigue siendo prioritaria para ciertos segmentos, Mallorca se consolida entre los principales refugios al alza en Europa. El Four Seasons Formentor, con tarifas que superan los 1.200 euros la noche, ejemplifica el nuevo paradigma del lujo tranquilo y sostenible.
La apuesta por la exclusividad no implica renunciar al entorno autóctono: la gastronomía local, el respeto por la arquitectura tradicional y las iniciativas eco-responsables se conjugan en la oferta de este renacido hotel. Tanto su spa, como sus servicios de restauración y actividades de bienestar, han sido ideados pensando en un visitante exigente y consciente de su entorno, interesado en la integración con la cultura balear.
Si está ahí el hotel ya no lo veo tan virgen!!