Tres agentes de la Guardia Civil se han reencontrado estos días con Juana Julia, una mujer a la que salvaron el pasado día 31 de mayo después de que un incendio se acercara peligrosamente a su vivienda, donde reside con su familia, en Campos.
Tras recibir el aviso de un incendio declarado en las inmediaciones de una vivienda habitada, una patrulla de la Benemérita de Campos se dirigió rápidamente al lugar. El fuego, avivado por fuertes rachas de viento, se acercaba peligrosamente cuando los agentes llegaron. Sin dudarlo, entraron en la casa y evacuaron a todos los residentes, entre ellos un hombre de edad avanzada.
Con un extintor, una manguera y cubos de agua que vecinos les facilitaron, los guardias civiles lograron contener las llamas hasta la llegada de los bomberos. Durante la intervención, se produjo además la explosión del motor de una embarcación situada en una finca colindante, aumentando aún más el riesgo para los agentes y los residentes de la zona, ya que la misma incrementó las llamas.
Días después, los agentes volvieron para abrazar a Juana Julia, una de las personas salvadas. Los cuatro, guardias civiles y la vecina, recordaron lo sucedido.
Hicieron falta tres. El bueno, el malo y el feo. La próxima vez mejor llevan una grúa.