Decenas de efectivos luchando contra las llamas en tierra. Todas las aeronaves activas e incluso apoyo aéreo desde el exterior. Brigadistas de Ibanat, Medi Ambient y Bombers de Mallorca trabajando sin descanso. Los alcaldes, los cuerpos de Policía Local y Protección Civil de hasta tres municipios. Es el balance de los últimos treinta días. Treinta días en los que el área natural protegida del Parc Natural de S'Albufera ha sufrido hasta cinco incendios diferentes que se han cobrado más de 220 hectáreas.
El que se originó este miércoles, el más virulento de todos. Con más de 110 hectáreas arrasadas, el fuego continuaba avanzando a causa de dos motivos principales: los cambios de viento y la dificultad de localizar los focos de inicio, al parecer, tres. Un indicativo habitual en los incendios intencionados.
De hecho, según el conseller de Agricultura, Joan Simonet, los agentes de la Unidad del Seprona de la Guardia Civil, además de los agentes de Medi Ambient, se encuentran analizando e investigando los incendios y sus orígenes para tratar de determinar qué está ocurriendo exactamente en la zona protegida.
«Las idas y venidas del viento nos han perjudicado, el cañizo sigue estando muy seco, ahora parece que está mejor pero nos ha llegado a desbordar a todos. Aún no está estabilizado y tiene focos diversos. Las unidades pertinentes están investigando y no podemos decir nada más para no entorpecer su trabajo», declaraba Simonet tras las primeras nueve horas de las tareas de extinción.
Durante todo el día, hasta seis aeronaves sobrevolaron una y otra vez la zona descargando agua para tratar de frenar el avance de las llamas sobre el cañizo; dos de ellas, como apoyo aportado por el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico (Miteco) debido a la gravedad potencial del incendio. Aunque al principio pareció catalogarse en el nivel cero, quince minutos más tarde, la alerta aumentó y más de veinte familias fueron desalojadas, sumándose a las decenas de personas a las que las llamas han obligado a evacuar durante este fatídico mes de octubre en cuestión de fuego. Los tres últimos incendios se han decretado en tan sólo quince días.
Imágenes en vídeo de Bombers de Mallorca durante el incendio del pasado 8 de octubre:
El primero se decretó a finales de mayo y quemó hasta 50 hectáreas, el segundo llegaría tan sólo cinco días después quemando mucho menos, 0,04ha; el 4 de octubre, tan sólo 48 horas después, el tercero ardería y calcinaría dos hectáreas más hasta dar paso el 8 de octubre al más grave hasta el momento, el de Ses Jonqueres Veres que acabó con 62 hectáreas destruidas. Este último ha superado todos los demás, calcinando más de 110 hectáreas y todavía (a cierre de esta edición) pendiente de estabilización y control.
Las sospechas crecen en las redes sociales:
El misterio está servido y las cifras lo reconfirman, ya que el 82% de la superficie quemada durante este 2024 pertenece al área de S'Albufera. Un dato lleno de significado. Al parecer, la investigación avanza y los agentes destinados a resolver el porqué de estos fuegos van estrechando el círculo. Si se confirma el hecho de que los incendios sean provocados, el siguiente paso será averiguar la razón; muchos apuntan a intereses urbanísticos en la zona, aunque S'Albufera está rodeada de suelo rústico, aún así, otros ponen el foco en los proyectos recientes que podrían construirse en los municipios afectados. El Seprona no se ha pronunciado y de momento lo único que no es una incógnita es la declaración del que supone el quinto incendio desde el pasado 28 de mayo.