Un juzgado de Instrucción de Manacor investiga a un hombre, español de 55 años, acusado de un delito contra la seguridad vial. Su hija de 10 años fue interceptada por agentes de la Policía Local de la capital del Llevant circulando con una minimoto de 100 cc por una vía urbana del polígono industrial de la localidad. Junto a la menor iba el padre en otra motocicleta.
Los hechos, según fuentes próximas al caso, se remontan al pasado domingo 16 de junio. Una patrulla de la Policía Local de Manacor, mientras realizaba labores de vigilancia en la zona del polígono, observaron a un ciclomotor y una minimoto circulando por la zona, concretamente por la calle Ferrers, por lo que se les dio el alto. Los motoristas eran el ahora imputado y su hija, de tan solo 10 años en el aquel momento -11 a día de hoy-.
El varón manifestó a los agente que ambos vehículos eran de su propiedad y que solo los utilizaba en zona privada. En esa ocasión relató a los agentes que habían llegado hasta allí por caminos secundarios. Los funcionarios comprobaron que la moto en la que circulaba la niña tenía número de bastidor. Es una minimoto de 75 kilos y que alcanza una velocidad máxima de 70 kilómetros por hora. En ese momento, y tras una serie de comprobaciones, levantaron denuncia y posteriormente enviaron toda la información al juzgado.
El padre acudió este jueves a la sede judicial de Manacor en compañía de su abogado, Nicolás Sosa, en calidad de imputado. El hombre, al que se le investiga por un presunto delito contra la seguridad vial, se acogió a su derecho a no declarar.