A falta de confirmación oficial, y a la espera de los resultados de las autopsias, previtos para hoy, Miquel Binimeli Matemales, el asesino confeso de Manacor, no descuartizó el cuerpo de su madre antes de prenderle fuego en el terreno de la finca propiedad de la familia. Los investigadores de la Policía Nacional llegaron a esta conclusión tras comprobar que el cadáver de la mujer, de 82 años, estuvo expuesto a altas temperaturas durante un largo periodo de tiempo, por lo que la falta de algunas partes del organismo es debido a la descomposición del mismo y no a que el asesino confeso hubiese optado por desmembrar a su madre antes de quemar el cuerpo. Durante horas esa fue la teoría que barajaron los agente desplazados a la finca familiar, ubicada a las afueras de Manacor.
El arrestado confesó a los agentes del Grupo de Homicidios a última hora de la tarde del martes que mató a su hermano Martí y a su madre tras sufrir un brote psicótico. Los golpeó a ambos con objetos contundentes. El varón fue hallado sin vida en un paso de la casa y la anciana quemada en el terreno de la finca, ubicada a las afueras de Manacor. En el mismo inmueble se encontraba el sospechoso y quedó arrestado. Tras ser esposado empezó a decir frases sin sentido y a intentar autolesionarse. Antes amenazó con quemar a los agentes. Tras ser examinado en el mismo lugar se decidió su traslado a Son Espases, donde ingresó en Psiquiatría.
Este miércoles estaba previsto que fuese interrogado por el juez de Instrucción número 2 de Manacor, pero finalmente la autoridad judicial aplazó la declaración del arrestado debido al estado de salud que atraviesa el asesino confeso.