El pasado día 4 de marzo agentes de la Policía Nacional procedieron a la detención en Palma de un joven de 20 años y de origen argelino como presunto autor de un delito de robo con fuerza en el interior de 17 coches estacionados. El delincuente fue arrestado mientras perpetraba uno de sus robos en el interior de un vehículo en Son Gotleu.
Los policías observaron a un hombre revisando el interior de varios coches que estaban aparcados. Tras verle, los agentes que estaban patrullando por la zona, iniciaron un seguimiento discreto del individuo y observaron que en ese momento que golpeaba una de las ventanillas de un vehículo, rompiendo el cristal para poder acceder a su interior y sustraer los objetos de valor de su interior.
Después de ver el episodio, los agentes interceptaron al hombre que estaba dentro de uno de los coches con una bolsa. En ella, llevaba varios objetos, entre los que había 17 herramientas, un bolso, joyas, dos pares de guantes y una navaja. Tras sus detención se hizo una vuelta de reconocimiento por las calles colindantes y se localizaron un total de siete vehículos más con signos de haber sido forzados.
Otra detención días antes
El 28 de febrero, el mismo joven fue detenido tras recibir una llamada por parte del 091 en el que un vecino denunciaba que había visto a un hombre dentro de un coche estacionado en la barriada de la Plaza de Toros y Son Oliva.
Cuando los agentes llegaron a lugar de los hechos, se entrevistaron con el vecino que había llamado minutos antes y les comunicó que había visto al sospechoso en el interior del coche. Una vez allí, los policías sacaron al joven del interior del vehículo y le requisaron bolsas, herramientas, guantes, linterna, navajas, destornilladores y un cúter. Además, vieron que la ventanilla de detrás estaba fracturada.
Tras su detención, revisaron un aparcamiento para descubrir si había más vehículos y en calles cercanas vieron un total de cinco coches forzados y en el que se echaban a faltar diversos objetos de valor. Además la Policía Local comunicó que en una calle cercana habían encontrado dos coches más con las ventanillas fracturadas y sangre. También se localizó en otra calle dos vehículos más con signos de haber sido forzados y con el interior revuelto en el que faltaban gafas de sol, una aspiradora y un maletín. Los propietarios de los coches y abonados al aparcamiento comentaron a los agentes que el joven solía frecuentar los trasteros del interior del parking.