Una patera se encontraba a la deriva y sin gasolina en medio del mar mediterráneo. En ese momento, un crucero que cubría la ruta entre Portugal y Palma les avisó y procedió a su rescate. A bordo de la embarcación viajaban 16 personas. Tras llegar a la Isla, agentes del Cuerpo Nacional de Policía detuvieron al patrón de la misma acusado de un delito de favorecimiento a la inmigración irregular y otro contra el derechos de los ciudadanos extranjeros.
El pasado día 17 de agosto, fue detectada una embarcación a la deriva. El capitán del crucero que se los encontró en el mar, frente a la costa de Almería, ordenó a su tripulación que efectuaran el rescate y los desembarcó en el Port de Palma, primer puerto de contacto. A bordo viajaban 15 personas de nacionalidad argelina y un único marroquí (patrón). La Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras se hizo cargo de todos los inmigrantes irregulares e inició la incoación de los preceptivos expedientes de devolución por entrada irregular al territorio nacional.
De las gestiones practicadas, se pudo determinar que la embarcación llevaba algún tiempo a la deriva en el momento de ser rescatada al haberse quedado sin combustible por lo que sus ocupantes se encontraban en grave riesgo para sus vidas. Los agentes identificaron al patrón y comprobaron que sobre el mismo pesaban múltiples antecedentes por robos, delitos violentos y otras modalidades delictivas. De hecho, había utilizado varias identidades falsas y que incluso había estado en prisión. En la base policial constaban antecedentes que se remontan al año 2003.
Una vez confeccionado el atestado policial, el acusado pasó a disposición judicial en los juzgados de Vía Alemania de Palma. El juez de guardia ordenó su ingreso en prisión. Desde el día 18 de agosto hasta la fecha han llegado a la costa mallorquina un total de diez embarcaciones con 196 inmigrantes irregulares. En lo que llevamos de año, la Policía Nacional ha detenido a 21 patrones de patera de las 53 embarcaciones y 912 migrantes llegados a bordo.