El Ministerio Fiscal solicita cinco años de prisión para el joven turista británico que rajó la cara con una botella de cristal rota a un portero de un local de Punta Ballena, en Magaluf, en julio de 2019. El procesado, además de la pena privativa de libertad, también se enfrenta al pago de una responsabilidad civil de 27.476 euros en favor del perjudicado. El juicio por estos hechos está previsto que se celebre próximamente en un juzgado de lo Penal de Vía Alemania, en Palma.
El terrible suceso, que dejó el rostro completamente desfigurado al empleado, un lituano de 29 años, de un conocido pub de Punta Ballena, tuvo lugar minutos antes de las 6.00 horas del 31 de julio de 2019.
Tal y como detalla la Fiscalía en su escrito de acusación, al que ha tenido acceso Ultima Hora, el imputado, por aquel entonces de 19 años, había sido invitado a abandonar el local debido a su comportamiento inadecuado. Tras esto estuvo conversando con el portero para convencerle de entrar de nuevo. De repente, y de manera totalmente inesperada, rompió una botella de cristal, se acercó a la víctima y le golpeó en la cara en dos ocasiones. El portero sufrió lesiones graves que le obligaron a pasar por el quirófano, recibió más de 50 puntos de sutura, y le han dejado importantes secuelas. El acusado fue arrestado minutos después de los hechos por agentes del GRACO (Grupo de Apoyo a la Compañía) de la Guardia Civil y se excusó diciendo que lo único que había hecho era defenderse de un ataque previo de seguridad. Dicha versión fue desmentida por las cámaras de seguridad del local, que grabaron la terrible escena.
El juez de guardia un día más tarde, tras varias horas de interrogatorio, lo envió a prisión bajo fianza de 15.000 euros. Dicha cantidad fue abonada por el procesado, que pudo regresar finalmente a su país. Ahora, tres años después de lo ocurrido, el joven no ha respondido a los continuos requerimiento del juzgado que investiga los hechos. Está en busca y captura.
El apunte
El agresor está en busca y captura tras no poder ser localizado por un juzgado de Palma
M.B. se encuentra actualmente en paradero desconocido. Regresó a su país tras abonar la fianza de 15.000 euros impuesta por el juez de guardia y nunca más se supo de él. Ante las reiteradas incomparecencias durante la fase de instrucción, el magistrado que investiga el asunto dictó una orden internacional de arresto contra el turista británico de un delito de lesiones graves. Tal y como apuntan fuentes judiciales, a día de hoy no se ha notificado en Vía Alemania que el joven procesado haya dado señales de vida.