La segunda sesión del juicio a la mujer acusada de asaltar sacerdotes e iglesias en Palma ha girado en torno a la situación mental de la acusada. Varios médicos forenses que durante los últimos años han realizado informes sobre la encausada, Merlinda M., han asegurado que la mujer sufre problemas mentales.
«Tiene un trastorno delirantemente crónico místico religioso. Se trata de una alteración mental, la persona cree unas determinadas cosas y actúa siguiendo esa creencia. En todo lo que no sea el delirio, ella es consciente de lo que es y no es correcto. Sin embargo, una agresión durante el delirio no es valorable ya que ella pierde la conciencia. La acusada en el contexto religioso pierde la conciencia», ha explicado el doctor Vicente Tur, el último médicos forense en realizar un informe de la acusada.
En la misma línea, el médico forense Borja Moreno, ha asegurado ante el tribunal que Merlinda M. «sufre una enfermedad del espectro psicótico, un trastorno delirante crónico, que afecta y altera su comportamiento» y que le hace tener «una sensación de conexión directa con Dios».
Dos testimonios que han suscitado algunas preguntas de la Fiscalía que en reiteradas ocasiones ha preguntado cual es el motivo que lleva a la acusada a mantener una actitud muy correcta durante el juicio a pesar de tener a muchas personas del entorno religioso cerca. En este sentido, cabe remarcar que la acusada a diferencia de la primera sesión del juicio este martes no ha sido esposada durante la vista.
En respuesta a las dudas del ministerio público, el forense Borja Moreno ha explicado que estas acciones agresivas o irracionales «van por brotes y hay una descompensación con momentos de altos y bajos». Como conclusión, los dos forenses han alertado de que Merlinda M. «requiere un tratamiento y de lo contrario puede agudizarse».
La mujer acusada de atacar, insultar y amenazar a sacerdotes en Palma se acogió este lunes a su derecho a no declarar, en el juicio que se está celebrando en la Sección Primera de la Audiencia Provincial. «No quiero declarar», dijo la acusada Merlinda M.