Su hijo se peleó con varios compañeros en el IES Ses Estacions de Palma y un profesor tuvo que mediar para que la cosa no fuese a más. Y ese simple gesto del docente no le gustó a la madre del menor, que fue a pedir explicaciones esa misma mañana al instituto. A pesar de que no podía acceder al centro sin cita previa, la mujer irrumpió y empezó a amenazar a todo el que se encontraba a su paso, incluido el director.
La Fiscalía solicita para la acusada, de nacionalidad española una multa de 1.350 euros por un delito de coacciones. El Govern, que ejerce de acusación particular, pide a la procesada una condena de dos años y dos meses de prisión al considerarla autora de un delito de allanamiento de morada. El juicio se celebrará en los próximos días en una sala de lo Penal de Vía Alemania.
Según el relato del Ministerio Público, el incidente se remonta a la mañana del 23 de septiembre de 2020. Minutos antes de las 12.00 horas la imputada acudió al instituto donde su hijo, menor de edad, cursaba sus estudios. El chico le mandó un mensaje advirtiéndole de que había tenido un problema con un profesor. Una vez en el centro, la mujer solicitó a la conserje de manera reiterada hablar con el docente, encontrando la oposición de la empleada. En esa época sólo se podía acceder a las instalaciones con cita previa, pero la acusada logró entrar.
Sus gritos pusieron en alerta a un grupo de educadores que se encontraban reunidos. Y también al director. Cuando intentaron calmarla, la mujer empezó a insultarles sin parar con expresiones como «ya vas a saber tú estos cabrones» y «ese profesor se esconde como un maricón, va a saber quién soy yo». No contenta con ello avisó a los compañeros del profesor de su hijo que iba a volver con un amigo y ya verían. Ante la situación de violencia que se generó, desde el centro avisaron a la Policía Nacional, que acudió al lugar. La mujer fue citada por el director a acudir dos días más tarde a una mediación y esta no se presentó en el instituto.
El Ministerio Fiscal pide para la acusada una multa de 1.350 euros. La considera autora de un delito de coacciones. Distinta opinión tiene sobre lo ocurrido el Govern, que además de las coacciones, considera que la mujer incurrió en un delito de amenazas, por el que pide una sanción económica, y además en uno de allanamiento de morada. Por esto último le solicita dos años y dos meses de cárcel.