Uno de los cuatro acusados que, según la Fiscalía, esperaban en tierra la llegada del 'narcosubmarino‘ a Galicia en noviembre de 2019, Iago Serantes, atribuyó este miércoles su presencia en esta causa por la «amistad» con uno de los tripulantes. El testimonio de Serantes, al que los investigadores consideran líder de una trama de narcotráfico, centró la tercera sesión de la vista oral del juicio en la Audiencia provincial de Pontevedra por el desembarco frustrado de más de 3.000 kilos de cocaína.
Ante el tribunal, Serantes reiteró su inocencia explicando que viajó desde Mallorca, localidad en la que reside, a Vigo porque Agustín Álvarez, el supuesto patrón del 'narcosubmarino', al que le unía una estrecha amistad, le «pidió ayuda», alegó. Sin embargo, el acusado insistió en que decidió volver a casa, un día antes de la llegada de la embarcación a las costas gallegas, cuando empezó a sospechar de que su amigo estaba involucrado «en algo ilícito», y particularmente, «valoramos que era un barco con droga», afirmó.
Las comunicaciones que, según Serantes, recibía de Álvarez por SMS y correo electrónico eran para decirle que «su barco se iba a pique< y que necesitaba ropa, comida o una furgoneta. «Es un amigo de toda la vida y pedía auxilio», explicó el acusado, que exculpó también a su padre y a Yago Rego, al que él mismo le llamó «porque también era amigo de Agustín y los dos estábamos muy preocupados» por su bienestar.